En Hermosillo apoyan fieles eventos pro Seminario Mayor

El padre Isaac Urías dijo que hay 31 seminaristas en preparación; uno de ellos está a punto de ordenarse tras nueve años de estudio

Por: Sebastián Moreno

Miles de hermosillenses apoyaron durante este pasado fin de semana al Seminario Mayor en asistiendo a las tradicionales fiestas anuales que se realizan para recabar fondos en Hermosillo.

El Rector del Seminario, el Padre Isaac Urías, agradeció a las familias que se dieron cita y que disfrutaron del encuentro con los seminaristas y colaboraron con esta noble causa.

Con 136 años de historia formando sacerdotes para la Diócesis de Hermosillo, dijo que actualmente el gasto operativo mensual oscila en los 300 mil pesos, que incluye desde el mantenimiento de las instalaciones, servicios, alimentación y mejoras que deben realizarse en las aulas, dormitorios y espacios generales.

Son 130 sacerdotes los que pertenecen a esta Diócesis de todo el municipio de Hermosillo, la Comisaría Miguel Alemán, Bahía de Kino, San Pedro El Saucito, pueblos del Río Sonora hasta Arizpe. También incluye Santa Ana, Magdalena, Benjamín Hill y Carbó.

Hay 31 seminaristas en preparación, expuso, uno de ellos que está a punto de ser ordenado en fecha próxima después de cursar los nueve años de estudio.

CONVIVENCIA, BAILE, CONCURSOS Y MUCHA COMIDA

Las actividades incluyeron música en vivo con varios conjuntos que amenizaron durante varias horas en las que jóvenes aprovecharon para bailar.

También se realizaron competencias deportivas con equipos representativos de las diversas parroquias en Hermosillo y hubo un concurso de coros religiosos.

Pero una de las áreas que estuvo llena al máximo, fue la zona de comida, donde familias enteras disfrutaron de tamales, pozole, menudo, chimichangas y toda una variedad de antojitos mexicanos.

Todo lo recabado se destina directamente las obras del Seminario y a su gasto de operación.

MISA SOLEMNE

A las 17:00 horas el Arzobispo de Hermosillo, Monseñor Ruy Rendón Leal, ofició la misa solemne en la que participaron todos los asistentes.

Posterior a eso siguió el convivio con encuentros con los seminaristas y grupos religiosos convocados a esta actividad, que año con año permite el flujo de recursos económicos para el Seminario.