Por más de cuatro décadas, Javier Escalante Izaguirre se ha dedicado a buscar tesoros en cualquier rincón de Álamos y del sur de Sonora.
Por: Fabián Pérez
El hombre de 72 años de edad, originario de la Ciudad de los Portales, aseguró que lo que inició como un pasatiempo, se convirtió en una de sus principales actividades.
“En realidad mi inquietud de buscar tesoros inició de muy joven. Al estar casado y con tres hijos, no podía dedicarme a esto de tiempo completo, pero cuando se graduaron, empecé con la actividad”, compartió.
Mencionó que al principio recorría campos y montes donde las personas le decían que veían llamas.
Al lugar, dijo, llegaba con pala y empezaba a escarbar, para posteriormente revisar si había algún tipo de material.
Comentó que para buscar tesoros se tiene que tener mucha fe y energía en su cuerpo, pues tienen que soportar temperaturas de calor extremas o bien lluvias, frío y otras inclemencias del tiempo.
“Muchos buscadores de tesoros han pasado experiencias de ver una señora de blanco, enanitos, gallinas blancas, carretas, entre otras cosas, pero en lo particular a mí no me han sucedido cosas extrañas”, contó.
Asegura que cuando observen llamas de lumbre del color de la flama de las estufas, puede ser un indicador de que en el lugar puede encontrarse oro enterrado.
“Cuando la flama es blanca hay plata y cuando se ve roja, nos indica que hay bronce”, explicó.
Invitó a la ciudadanía a ponerse en contacto con él al teléfono 6681240882 en caso de observar algo similar en sus lugares de residencia, ya que la información proporcionada le puede cambiar la vida.