La defensa del asesino alegó que el ataque se dio porque el hombre estaba frustrado por no tener la custodia; la gente está indignada
Por: Edel Osuna
Por fin el más alto tribunal de Japón sentenció a un hombre a 9 de los 13 años a que se esperaba fuera condenado, por el monstruoso asesinato de su hijito de 9 meses.
El crimen de Kazuki, como fue identificado el asesino del pequeño, ocurrió entre agosto y septiembre de 2018, pero dado a las indagatorias, su condena fue emitida este mes.
De acuerdo con las pesquisas, el hombre agredía a su pequeño con frecuencia, pero el día del asesinato, el tipo lo golpeó en la cabeza en repetidas ocasiones, hasta que cráneo del pequeño se fracturó.
En vez de detenerse, Kazuki continúo agrediéndole en la cabecita, esta vez a puñetazos, hasta que lo mató.
Según peritos forenses, la causa de muerte del bebé ocurrió a raíz de un traumatismo craneoencefálico severo.
La defensa del infanticida alegó que el hombre sufrió un arrebato de "frustración" por no tener la custodia del pequeño y arremetió contra él; asimismo, prometió someterse a rehabilitación, a fin de reintegrarse a la sociedad.
Cuando los medios dieron a conocer la sentencia, la ciudadanía se indignó, pues alega que la defensa le restó importancia al hecho del agresor y que nueve años de cárcel son poco castigo para quien mató a un indefenso de manera tan cruel y fríamente.