Al parecer, el correctivo que le aplicaron al adolescente de 15 años de edad lo enfureció tanto que tomó el arma y descargó en ellos su ira
Por: Edel Osuna
Furioso porque sus padres le desconectaron el WiFi, Santi, un adolescente de 15 años de edad que sacó malas calificaciones, tomó una escopeta y la descargó sobre sus progenitores y en su hermano de 10; además, retuvo los cuerpos en la cochera por tres días.
Los hechos ocurrieron en una casa ubicada en Elche, comunicada ubicada a 20 kilómetros de la ciudad Alicante, España.
De acuerdo con las autoridades, el crimen ocurrió el martes, pero todo se descubrió el viernes, cuando la hermana de la madre de familia se presentó en el domicilio a buscarlos, pues no sabía nada de ellos.
"La hermana de la madre acudió a la casa porque no tenía noticias de la familia y fue entonces cuando su sobrino le dijo que había matado a su padre, a su madre y a su hermano", explicó la autoridad.
Cuando revisaron el inmueble, la Policía encontró los tres cuerpos y el joven sin inmutarse por ello, pues tenía tres días en la casa.
De inmediato el jovencito fue interrogado, y confesó que sostuvo una discusión con su mamá por sus malas calificaciones en la escuela.
Furioso, tomó la escopeta de caza de su papá y abrió fuego contra su mamá y después le disparó a su hermano, de 10 años de edad.
Aún respirando ira, el joven espero a que su padre volviera del trabajo a casa, y cuando entró lo asesinó.
Pese a que la familia tenía mucho tiempo viviendo en la región, para la Policía no era conocida.