¿Qué es el Fobaproa y por qué AMLO y Zedillo están debatiendo sobre el tema?

Tras las recientes polémicas entre ambos políticos, surgió de nuevo el caso y la deuda que generó a finales de los noventa en México

Por: Marcela Islas

Recientemente ante la crítica que realizó el expresidente Ernesto Zedillo sobre la aprobación de la Reforma al Poder Judicial, impulsada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el actual mandatario mencionó nuevamente al Fobaproa. Sin embargo, ¿qué es y cómo se relaciona con la actual situación de México?

¿Sabías que cada vez que pagas impuestos, estás contribuyendo a saldar una deuda que se originó hace más de 20 años? Esta deuda, conocida como Fobaproa, nació como una supuesta solución a una crisis financiera, pero terminó convirtiéndose en uno de los mayores escándalos financieros de México.

¿QUÉ FUE EL FOBAPROA?

A principios de la década de los noventa, el gobierno mexicano creó el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) con el objetivo de rescatar a los bancos que enfrentaban dificultades financieras. La idea era evitar una crisis bancaria mayor y proteger el ahorro de los ciudadanos.

Sin embargo, el Fobaproa terminó asumiendo una deuda masiva, la cual fue pagada y sigue siendo pagada por todos los contribuyentes mexicanos.

En 1995, durante la administración de Ernesto Zedillo, se activó el Fobaproa para rescatar a los bancos en crisis. El gobierno terminó comprando la deuda de estas instituciones por una cantidad exorbitante, lo que representó un fuerte golpe a las finanzas públicas.

LAS CONSECUENCIAS DEL FOBAPROA

Las consecuencias del Fobaproa fueron devastadoras para el país. La deuda contraída para rescatar a los bancos limitó el gasto público en áreas fundamentales como salud, educación e infraestructura.

En otras palabras, el dinero que podría haberse utilizado para mejorar la calidad de vida de los mexicanos se destinó a pagar los errores de unos pocos. Esta situación generó un profundo sentimiento de injusticia y contribuyó a la desconfianza en las instituciones.

A pesar de que han pasado más de dos décadas desde la crisis del Fobaproa, sus efectos siguen siendo visibles en la actualidad, como una carga para las finanzas públicas y una limitante en las posibilidades de inversión en el país.