"No vuelvas", volvió y ahora sí su marido la asesinó

Su familia le decía que no regresara; días después de su desaparición hallaron su cuerpo en descomposición en un canal

Por: Edel Osuna

El 9 de diciembre fue la última vez que Saida Patricia Espinoza Valdez fue vista con vida; 10 días después, su cadáver en descomposición fue encontrado en un canal de aguas negras, cercano a su casa en el poblado El Cubilete, Guasave, Sinaloa.

La mujer de 42 años de edad era originaria de la comunidad El Mezquitón, y, aunado a los reportes de la familia y debido a las condiciones en que fue encontrada, las autoridades pusieron el ojo en un sospechoso: su expareja.

De acuerdo con la necropsia, y dado a las condiciones de los restos, Saida Patricia pudo ser asesinada el mismo día de su desaparición con un golpe en la cabeza.

Su desaparición fue reportada por su propio hijo de 21 años, y debido a los constantes problemas que tenía con su esposo y a que este ya la había golpeado, todo apunta a él.

Tras la autopsia, la Fiscalía de Justicia de Sinaloa entregó el cadáver a la familia, a fin de que fuera sepultada, con ayuda en gastos funerarios por parte del Estado.

EL SEPELIO

Durante las exequias de Saida Patricia, sumamente consternada, su hermana Aradia recordó cuando fue por ella a El Mezquitón, donde vivía con el presunto asesino y la encontró golpeada; en esa ocasión, ella le dijo a su hermana que no volviera, porque corría peligro, pero Saida ignoró la petición de Aradia.

“Ya se lo habíamos advertido, él ya la había golpeado una vez, yo fui y la recogí, y pues… a ella se lo dijimos: '¡no vuelvas!', y volvió ¿Para qué? Para que pasara esto, cuando ya no había remedio."

Indició que ahora lo único que espera es que se haga justicia, que el feminicidio de Saida Patricia no quede impune.

Expuso que la muerte de una mujer cala, pero más cuando es tu sangre; y aprovechó para hacer un llamado a las féminas y a la sociedad para que dejen de normalizar la violencia; que no pasen por alto ninguna agresión, verbal o física, pues el peligro de muerte es latente.

Pidió que huyan en la primera, que busquen ayuda y hasta demanden, pues ninguna mujer está exenta de la violencia criminal, como el caso de su hermana.

Los restos de Saida Patricia fueron velados en la comunidad El Cubilete, de donde el cortejo fúnebre partió al panteón de Tamazula, encabezado por su hijo de 21 años, que fue quien denunció su desaparición y ahora enfrenta el dolor de la pérdida de su mamá.