Este producto es muy usado para la limpieza de los hogares debido a su poder desinfectante; sin embargo, hay que tomar precauciones
Por: Ofelia Fierros
En busca de mantener los espacios de la casa limpios y desinfectados, es común recurrir al cloro como producto de limpieza, especialmente al tratarse de las excreciones de las mascotas.
Sin embargo, expertos advierten sobre los peligros asociados con el uso directo del cloro al limpiar la orina de los perros, destacando riesgos para la salud y la formación de gases tóxicos.
El cloro es reconocido por su poder desinfectante y su capacidad para eliminar olores desagradables; sin embargo, contiene un compuesto químico llamado hipoclorito de sodio, también conocido como lejía o lavandina, y aunque es efectivo en la desinfección, este compuesto es corrosivo y puede causar irritación y quemaduras en la piel y los ojos.
¿POR QUÉ NO SE DEBE UTILIZAR CLORO PARA LIMPIAR LA ORINA DE LOS PERROS?
La principal causa es la reacción química que se produce al limpiar la orina de perros con cloro directamente, ya que este desecho de los canes contiene pequeñas cantidades de amonio, que, al entrar en contacto con el hipoclorito de sodio, forma cloraminas, un gas tóxico perjudicial para la salud humana.
Las cloraminas pueden provocar irritación en los ojos, piel, nariz y garganta, así como dificultades respiratorias si se inhalan. Además, la exposición prolongada a este gas podría causar daño hepático, ya que se considera hepatotóxico y carcinogénico.
Ante estos riesgos, los expertos recomiendan evitar el uso directo de cloro al limpiar la orina de los perros, o bien, limitar su uso para este fin.
En su lugar, se aconseja secar bien la superficie, enjuagar con agua para eliminar rastros y luego proceder con la limpieza y desinfección utilizando jabón o cloro, pero nunca ambos productos simultáneamente, ya que la combinación de productos de limpieza con cloro tampoco es buena para la salud.
Asimismo, es importante prestar atención a las instrucciones de uso en las etiquetas de los envases de cloro, que indican las diluciones adecuadas y las precauciones necesarias.
Es importante señalar que la combinación de productos químicos en la limpieza puede ser perjudicial tanto para las mascotas, como para sus dueños.