Cada nombre cuenta una historia y se descubre más sobre las comunidades que los llevan con orgullo
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
Sonora, uno de los estados más extensos de México, lleno de diversidad cultural y geográfica. Con sus 72 municipios, la región alberga una riqueza lingüística que refleja su herencia indígena y su historia única. Desde nombres que evocan la naturaleza hasta aquellos que despiertan la curiosidad, los pueblos y lugares de Sonora ofrecen una ventana a su identidad singular.
Algunos de estos nombres pueden parecer divertidos o incluso raros a primera vista, pero tienen profundas raíces en la historia y la cultura mexicanas. Reflejan la identidad única de cada región y están cargados de significado para quienes llaman a estos lugares su hogar.
¿CUÁLES SON LOS PUEBLOS Y LUGARES CON LOS NOMBRES MÁS RAROS EN SONORA?
- Naco: Este pueblo lleva el nombre de "nopal" en lengua ópata y surgió en 1900 con la construcción del ferrocarril Naco-Cananea.
- Pitiquito: Derivado del jefe indígena "Piti" o "Pitic", quien vivió en la ranchería donde se erigió la iglesia del pueblo.
- Tubutama: Su nombre en lengua o'odham significa "liebre sentada en lo alto de la colina".
- Divisaderos: Nombrado así por su ubicación en la sierra alta de Sonora, del verbo "divisar".
- Nácori Chico: Proviene del ópata "Nacoripa", que significa "lugar del nopal".
- Sahuaripa: En ópata, significa "hormiga amarilla", compuesto por "sagua" (amarillo), "arit" (hormiga) y "pa" (terminación locativa).
- Suaqui Grande: Del pima "suaaqui", que significa "corazón de pitahaya".
- Baviácora: Su nombre se deriva del ópata "Babícor", que significa "la yerbabuena que crece en el río".
- Etchojoa: Del dialecto mayo, compuesto por "etzo" (cardón) y "jova" (habitación), que significa "Casas de cactus o echos".
- Tepache: Del ópata "Tepatzi", que puede significar "lugar de mujeres bellas", "lugar del árbol en la piedra" o "lugar de frijol".
Estos nombres no solo son una muestra de la diversidad lingüística de Sonora, sino también una ventana a su historia y conexión con la tierra. Cada nombre lleva consigo siglos de tradición y un legado que perdura en la identidad del estado.