Por: Eduardo Sánchez
“¿Por qué tienen que ir médicos del sector privado al público, cuando nosotros le pagamos los sueldos y tienen que hacer lo que dice la ley?”, señaló en entrevista la doctora tras enfrentar una absurda polémica al cumplir lo estipulado por ley para casos de embarazo por violación: la interrupción legal del embarazo.
“Ayer se le salvó la vida a esa niña, que nunca debió haber llegado a las 23 semanas de edad gestacional”, recalcó la ginecóloga en una entrevista para Radio Prensa. "La niña quería que le sacaran lo que el viejo le había puesto adentro”.
En el quirófano estuvieron presentes Ousset, su esposo, el médico José Gijena quien fungió como instrumentista y una anestesista de Maternidad tras la convocatoria de la ministra de Salud de la provincia de Tucumán, Rossana Chahla, y el Secretario Ejecutivo del Sistema Provincial de Salud (Siprosa), Gustavo Vigliocco, para la práctica de emergencia.
La ginecóloga, quien dirigió la operación, dijo que la menor de edad corría el riesgo de morir de no realizar la cesárea, además la niña deberá estar atendida por un equipo interdisciplinario que incluya un trabajador social y un psiquiatra infantil, así como un control postoperatorio debido a que tiene cuatro veces mayor riesgo de morir.
Ousset añadió que mandó la placenta y el cordón umbilical a análisis de ADN para que no exista duda sobre la identidad del agresor sexual.
Con información de Radio Prensa y Clarín