Cuando los niveles de glucosa en la sangre aumentan, también pueden causar problemas de salud
Por: Brayam Chávez
Es crucial entender y controlar los niveles de glucosa o azúcar en nuestra sangre, ya que estos son esenciales para el correcto funcionamiento de ciertos órganos de nuestro organismo.
Es importante destacar que la glucosa es la fuente primordial de energía para las células corporales, en particular para el cerebro y los músculos. Además, tiene un rol vital en la regulación del metabolismo, dado que es imprescindible para la generación de ATP, la molécula que guarda energía en las células.
Sin embargo, si los niveles de glucosa se elevan y alcanzan niveles elevados, también pueden surgir problemas de salud. Por ello, te explicamos los síntomas de tener estos altos niveles de azúcar que pueden ser peligrosos y pueden provocar una hiperglucemia.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE TENER AZÚCAR ALTO?
Los signos de glucosa alta en la sangre pueden diferir entre individuos, pero hoy te presentamos los síntomas más destacados de tener niveles elevados de glucosa en la sangre.
- Una gran sed (excesiva): La elevada glucosa en la sangre puede provocar la pérdida de líquidos en el organismo, provocando una sed intensa.
- Frecuentes ganas de orinar: El alto nivel de glucosa en la sangre también puede provocar que el organismo genere más orina, lo que resulta en una frecuencia urinaria elevada.
- Agotamiento o cansancio: La elevación de glucosa en la sangre puede provocar que el organismo no emplee eficientemente la glucosa, generando una sensación de agotamiento y debilidad.
- Mucha hambre: La elevación de glucosa en la sangre también puede provocar que el organismo no emplee eficientemente la glucosa, provocando una intensa sensación de hambre.
Sin embargo, también hay otros signos que nos indican un nivel significativamente superior de glucosa en la sangre o hiperglucemia, y a los que debemos prestar mucha más atención.
- Visión distorsionada: El alto nivel de glucosa en la sangre puede provocar una alteración en los fluidos oculares, provocando así una visión borrosa.
- Las heridas que no se curan: La elevación de glucosa en la sangre puede causar que el organismo no cure las heridas de forma eficaz.
- Frecuentes infecciones: El alto nivel de glucosa en la sangre puede causar una disminución del sistema inmunológico, lo que resulta en infecciones más habituales.
- Inquietud o sensación de presión en las manos y los pies: El alto nivel de glucosa en la sangre puede provocar perjuicios a los nervios, provocando dolor o sensación de adormecimiento en manos y pies.
Es importante destacar si experimentas síntomas leves o severos, particularmente en las primeras fases de la diabetes. Sin embargo, si experimentas alguno de estos síntomas, es crucial que acudas a un médico para establecer la causa que los origina.