El mandatario explicó que el distanciamiento será con los embajadores Ken Salazar, de Estados Unidos, y Graeme Clark, de Canadá
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aclaró este miércoles que la "pausa" en las relaciones con Estados Unidos y Canadá solo se aplicará a las embajadas de ambos países en México, no a los gobiernos o a sus homólogos, Joe Biden y Justin Trudeau.
Durante la conferencia de prensa realizada en Palacio Nacional, el mandatario explicó que el distanciamiento será con los embajadores Ken Salazar, de Estados Unidos, y Graeme Clark, de Canadá, después de que ambos diplomáticos expresaron su preocupación por la propuesta de reforma al Poder Judicial en México.
"La relación con los gobiernos continúa, es nada más con las embajadas y en especial con los embajadores, porque no les corresponde opinar sobre asuntos que solo competen a los mexicanos. Es un asunto de respeto a nuestro país", declaró.
¿PEDIRÁ AMLO QUE SALAZAR ABANDONE EL PAÍS? ESTO RESPONDIÓ
El mandatario también aclaró que no solicitará que Salazar abandone el país, pero subrayó que esta medida es necesaria para que los diplomáticos "aprendan".
"Ellos quisieran tener injerencia en asuntos que solo le corresponden a los mexicanos. Ojalá haya de parte de ellos una rectificación de que van a ser respetuosos de la independencia de México, de la soberanía de nuestro país. Tienen que aprender, no es cualquier cosa", afirmó.
¿QUÉ RESPONDIÓ KEN SALAZAR A AMLO?
Durante la conferencia del 27 de agosto, López Obrador había anunciado la decisión de su administración de poner una pausa en las relaciones con las embajadas de Estados Unidos y Canadá.
Horas después, Salazar respondió que la embajada estadounidense siempre ha trabajado con el máximo respeto a la soberanía de México, como se expresó en una nota diplomática enviada el pasado 23 de agosto.
En el documento, se menciona que Estados Unidos apoya el compromiso de México de fortalecer el Estado de derecho a través de la reforma judicial, con el objetivo de crear un Poder Judicial con "independencia, autonomía y legitimidad".
Sin embargo, la embajada estadounidense expresó su preocupación por la elección popular de jueces y la posibilidad de que la reforma no aborde adecuadamente la corrupción judicial.