Por: Eduardo Sánchez
No importaba la fecha del año ni la inclemencia temporal, fuese lluvia o frío, siempre esos tres días de la semana había personas formadas a pie de la puerta parroquial.
Hace más de 15 años, Bautista Ávalos era el párroco de la Iglesia María Reina, dos calles antes de la Veracruz, en la misma colonia Miguel Hidalgo.
Quienes lo conocen desde entonces, cuentan que Francisco Javier fue preparado en el Vaticano para ser exorcista, aunque no se pudo confirmar si en efecto tomó alguno de los seminarios que imparten allá.