Con esta planta ancestral podrás teñir tu cabello, ¡sin químicos y con grandes beneficios!

Es una alternativa natural para darle color a tu pelo, y las tonalidades que brinda son marrón, naranja o rojizo. Te decimos cómo prepararla

Por: Edel Osuna

El tiempo no perdona, y la edad trae consigo no nada más la aparición de arrugas en la cara y en el cuerpo, sino también las canas, un problema capilar cuya aparición obedece a diversos factores; sin embargo, así como existen tintes químicos para el cabello, también existe una planta natural para ello, con más beneficios que daños.

En el antiguo Egipto, la henna era sumamente popular y jugaba un papel significativo tanto en la cosmética como en las prácticas religiosas y culturales, pues se usaba para teñir el cabello, así como el cuerpo, como actualmente ocurre en algunas naciones.

Y en la búsqueda de ser amigables con el medio ambiente y menos agresivas para el cabello, muchas personas están buscando opciones naturales para teñir su melena, entre las cuales está la henna, una de las favoritas debido a sus propiedades tintóreas y a sus beneficios para el cabello.

La henna es un tinte natural derivado de la planta del mismo nombre, que ofrece una manera segura y efectiva de cambiar el color del cabello sin recurrir a productos químicos agresivos.

Para utilizarla, basta con mezclarla con agua caliente o té de hierbas, a fin de crear una pasta que luego se aplica al cabello; la tonalidad final que tome dependerá del color natural del cabello y del tiempo que se deje actuar, ya que puede producir tonos rojizos, marrones o naranjas, y hasta podrás personalizar el color.

Por otra parte, además de teñir el cabello, la henna también ofrece otros beneficios, como la salud del cuero cabelludo, pues fortalece el cabello, lo deja más suave y brillante, además de cubrir las canas de manera natural.

Así las cosas, con sus bondades la henna se ha convertido en una opción atractiva para aquellos que desean experimentar con su cabello de forma segura y natural; sin embargo, es importante que hagas una prueba de alergia antes de usarla, especialmente si es la primera vez que la empleas.

ASÍ DE SENCILLO PUEDES PREPARAR LA HENNA PARA TEÑIR EL CABELLO

Para evitarte todo el proceso que requiere la preparación de un tinte químico para tu cabello, aquí te damos una serie de pasos para que lo hagas con grandes resultados:

  • Compra henna de calidad: que sea pura y natural, preferiblemente en polvo, en tiendas de productos naturales o en línea.
  • Prepara la mezcla: mezcla la henna en polvo con agua caliente o té de hierbas caliente en un recipiente que no sea metálico; la cantidad de henna y líquido que ocupes dependerá de la longitud y grosor de tu cabello, y de la intensidad de color deseada.
  • Deja reposar la mezcla: cuando hayas obtenido una pasta suave y homogénea, cubre el recipiente y déjala reposar entre 6 y 12 horas, para que los pigmentos se liberen.
  • Aplica la henna en el cabello: usa guantes para proteger tus manos; luego aplica la pasta sobre el cabello limpio y seco; asegúrate de cubrir uniformemente todas las secciones. Usa una brocha o tus manos para aplicarla.
  • Deja actuar: tras aplicarla, deja actuar la henna en el cabello el tiempo recomendado en las instrucciones del fabricante o según tu preferencia de color. El tiempo puede variar entre una y cuatro horas, dependiendo de la intensidad deseada.
  • Enjuaga: pasado el tiempo de actuación, enjuaga tu cabello con agua tibia hasta que el agua salga clara; además, no uses champú en el primer enjuague, para que la henna se asiente en el cabello.
  • Seca y estiliza: finalmente, seca tu cabello como acostumbras. Notarás el color final de la henna unas horas después de aplicarla, ya que seguirá desarrollándose durante un tiempo.

Recuerda: la henna es permanente, por lo que es aconsejable realizar una prueba de alergia y un mechón antes de aplicarla por completo, especialmente si es la primera vez que la usas, y ten en cuenta que el color final varía según el color natural de tu cabello y el tiempo de exposición al producto.