El manejo de este trastorno conductual sigue siendo un desafío por lo que especialistas han creado estrategias para que cada persona pueda afrontarlo
Por: César Omar Leyva
El manejo de la ansiedad es un desafío creciente en la sociedad actual, y especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han compartido estrategias clave para afrontarla.
Esta semana en la UNAM se impartió el taller "Arma tu kit para el manejo de la ansiedad" promovido por la Dirección General de Atención a la Salud (DGAS), donde expertos en medicina conductual ofrecieron herramientas prácticas para reconocer y controlar los síntomas de la ansiedad.
ESTRATEGIAS PARA REDUCIR LA ANSIEDAD
El Dr. Carlos Silva Ruz, junto con Andrea Hernández Zamayoa y Miguel Ángel Sánchez Rodríguez, explicaron que la ansiedad puede generar miedo o preocupación excesivos, afectando la funcionalidad diaria. Para contrarrestar sus efectos, recomendaron técnicas como:
- Respiración diafragmática: ayuda a inducir un estado de calma mediante inhalaciones y exhalaciones controladas.
- Relajación muscular progresiva: reduce la tensión acumulada al alternar entre tensión y relajación de distintos grupos musculares.
- Mindfulness o conciencia plena: fomenta la atención en el presente para disminuir la reactividad ante el estrés.
Los especialistas señalaron que la clave para manejar la ansiedad es el reconocimiento personal de los síntomas y la aplicación de estas técnicas de forma constante.
EL IMPACTO DE LA ANSIEDAD Y LA IMPORTANCIA DEL APOYO EMOCIONAL
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que una de cada ocho personas en el mundo padece un trastorno mental. En este contexto, talleres como el de la UNAM contribuyen a mejorar la salud emocional de la comunidad universitaria, ofreciendo herramientas accesibles para gestionar la ansiedad y enfrentar el estrés de manera efectiva.
Promover la educación en salud mental y brindar espacios de apoyo es esencial para fortalecer el bienestar psicológico. Identificar los factores que desencadenan la ansiedad y aprender a gestionarla de forma progresiva son pasos fundamentales para mejorar la calidad de vida.