Por: Eduardo Sánchez
Los cocoreños estaban felices porque ahora si vieron camionetas buenas para perseguir a los delincuentes.
Pero el gozo se fue al pozo porque solamente se trataba de policías que iban tras los vecinos inconformes con la comisaria Martha Elena Ramírez, a quien por cierto vieron aparecer en la camioneta de Comisarías y Delegaciones.
Una vez desalojados y que los agentes municipales sacaron mucha documentación del edificio, las patrullas se quedaron frente al lugar y no se movieron en todo el día.
Y pensar que los vecinos creyeron que iban por los maleantes, pero no. Muy a gusto se la pasaron tirando barra los elementos policiacos todo el día sin hacer algo de provecho por la comunidad.
Y por ello piden ya que sea destituido el Secretario del Ayuntamiento, Ascensión López Durán, quien en todo momento negó un operativo policiaco cuando en la Comandancia de Policía tenían incluso a una señora de 65 años y a una persona que por su diabetes se le bajó la presión y en el parte médico decía que estaba bajo el influjo de las drogas.
Ahora sí que se pasaron de lanzas, dijo la raza.
AH QUÉ LOS JUECES
Textualmente, nos hace llegar don Alejandro de la Torre Domínguez, los resultados de una "escarbadita" en los archivos de Oficialía Mayor del Ayuntamiento, que informó, aunque no de muy buena gana, que de los 11 jueces calificadores de la Secretaría de Seguridad Pública, sólo uno de ellos tiene Cédula Profesional y seis de ellos no tienen título de licenciado en Derecho.
"Esto es que el 50 por ciento no puede litigar en juzgados y tribunales, si así se requiriera ante un litigio entre el Ayuntamiento y particulares", afirma. También incumplen con el Reglamento del Ayuntamiento y la Ley de Seguridad Pública porque fueron nombrados por recomendaciones e influencias de funcionarios o intereses colocados en el Ayuntamiento mariscalista.
O sea, ¿eso formará parte de la cuarta transformación? Poner en manos de cualquiera la aplicación de justicia en la barandilla significa que a una persona que toma medicamentos para la diabetes y a la que ayer se le bajó la presión al ser detenido en Cócorit, le pusieran que iba bajo los influjos de las drogas.
Se siguen pasando de lanzas. Ya ni se siga de las versiones sobre la solicitud de cuotas a los jueces calificadores.
ISSSTE OBREGÓN: LAS FALLAS
Otros que se siguen quejando son los visitantes, a la fuerza por sus enfermedades, de la clínica del Issste en Ciudad Obregón, pues los problemas del aire acondicionado siguen igual que siempre: sin funcionar adecuadamente.
Es hora ya de que el doctor Severo Castro Paz abogue por la solución definitiva a ese problema, ya que de por sí las personas acuden estresadas y con sus dolencias al lugar, con mayor razón se sentirán mal con estas temperaturas que se han dejado sentir en la región.
Ese problema, junto con el de los elevadores y la falta de equipo quirúrgico o medicamentos, se han observado desde hace muchos años en esa institución y no ha habido poder humano que le ponga remedio.
Esperemos que pronto también aquí llegue la cuarta transformación.
TEMBLOR Y TEMOR
Nuestra corresponsal en Los Ángeles, California, Blanca Laurean Juárez, informó anoche sobre el terremoto de 7.1 grados que se sintió en esa comunidad y hasta en Tijuana, y, claro, el temor entre la gente se afianza por el asunto de la llamada Falla de San Andrés.
Según reportes científicos, la mayor preocupación radica en el extremo sur de la falla, pues se tienen registros previos de actividad sísmica cada 150 años aproximadamente, pero ahora ya han pasado 300 años sin que esta parte haya tenido movimiento, lo que sin duda representa una acumulación de energía que al momento de liberarse podría desatar uno de los terremotos más destructores de la historia.
La ciudad de Los Ángeles y comunidades aledañas, se preparan para una situación de emergencia, ya que los científicos pronostican que este sismo de gran magnitud podría presentarse dentro de los próximos 30 años.
¡Pa´ su mecha Marimar!