Agroquímicos son “un mal innecesario”

Por: Eduardo Sánchez

El uso de agroquímicos en la agri­cultura cumplió su ciclo y se tiene que dar el paso a un modelo sus­tentable, que pare la destrucción, que no sólo está acabando con los suelos, sino que ha tenido un grave impacto en la salud del hombre.


Por: Luz del Carmen Paredes

Hans Braun subrayó que, en el caso del trigo, a nivel mundial, en países de Europa y Estados Unidos están demandando la producción orgánica.


Desde el punto de vista ambiental, tam­bién hay restricciones, y cada vez se utilizan menos sustancias tóxicas, sustituyéndose estos plaguicidas y herbicidas por otros pro­ductos que no son nocivos, apuntó.

El director del Programa Global de Trigo del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (Cimmyt) desde 2006 resal­tó que México va para ese rumbo, aunque aquí, como en otros países subdesarrollados siguen utilizando los agroquímicos.

Pero no se puede negar que hay avances importantes, en el Cimmyt el material ge­nético con el que se cuenta por su alta resis­tencia a plagas y enfermedades, así como a la variabilidad climática, puede ser utiliza­do para producir de manera orgánica.

VALLE DEL YAQUI

Aquí el panorama es crítico el uso de sus­tancias tóxicas es el común denominador, y lo más grave es que se siguen utilizando agroquímicos, que en otros países ya fueron prohibidos.

Ramón Morales Valenzuela señaló que a nivel nacional existen 602 plaguicidas prohibidos y de estos 140, el 23 por ciento son autorizados por la Comisión Federal Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para su uso masivo en México, según el catálogo de plaguicidas del 2016.

El presidente de Agricultura Experi­mental Alternativa (Agrexa), indicó que, entre los 140 agroquímicos prohibidos, 65 cumplen con uno o más criterios para ser considerados como altamente peligrosos.

Impactando en el empobrecimiento del suelo, fuertes problemas fitosanitarios, y en lo económico altos costos de producción y lo más grave el daño a la salud del hombre, refirió,

Porque hay estudios científicos que demuestran que son altamente cancerí­genos, además de causar otras enferme­dades.

Explicó que el Paration Metálico, insecti­cida que ocupa el primer lugar en aplicacio­nes en el sur de Sonora y que está prohibido en otros países tiene una alta toxicidad y es fatal en caso de inhalación. Así mismo el Cloripirifos Etil, que fue encontrado en leche materna, flujo vaginal, fluidos de es­perma, en sangre del cordón umbilical y el meconio del bebe.

Y la Cipermetrina que ocupa el tercer lugar en su uso, es altamente nociva para las abejas, además que está relacionada con problemas de reproducción masculinos, cáncer de mama y daños en el sistema in­munológico, señaló.

Otros tóxicos utilizados son los herbicidas como el Glifosfato, asociado con problemas cancerígenos, daños en el hígado, alteracio­nes hormonales, problemas respiratorios e intestinales.

Las doce empresas que tienen registro para manejar estos productos son: Bayer, Syngenta, FMC, Dow, Basf, Velsimex, Agri­cultura Nacional, UPM, Agroquimicos Ver­sal, Agrevo Mexicana y Cheminova,

ALTERNATIVAS

Estableció que existen alternativas que pueden sustituir el uso de estas sus­tancias tóxicas, que incluso a nivel co­mercial ya se producen y que distribuyen las mismas empresas de agroquímicos, como los extractos vegetales (goberna­dora, epazote, higuerilla, entre otros) y los preparados minerales y todo esto lo puede hacer el agricultor, reduciendo así los costos de producción, así como el uso de insectos benéficos.

Precisó que actualmente la agricultura orgánica a nivel nacional, incluyen cien cul­tivos, lo que demuestra que hay alternati­vas.

Destacó que en el Valle del Yaqui, no hay producción orgánica, sólo en algunos culti­vos de hortalizas, pero en trigo y otros gra­nos, solo en algunas parcelas demostrativas, aunque reconoció que se está avanzando, ya que algunos productores, están buscando alternativas, como reincorporar la paja de trigo y utilizar fertilizantes orgánicos que se producen aquí como los biofertilizantes fermentados, microorganismos benéficos, caldos minerales, extractos vegetales y el lixiviado y vermicompost de lombriz roja californiana.

HAY MAYOR CONCIENCIA

Antonio Gándara Astiazarán resaltó que los productores tienen mayor conciencia y se está invirtiendo para seguir avanzando, principalmente en investigación,

Y un ejemplo es el Centro Regional de Estudios y Reproducción de Organismos Benéficos (Crerob), que a nivel América La­tina es el más importante, “aquí se produce todo el año, para que sea la propia natura­leza, en la medida de lo posible la que con­trole las plagas, reduciendo el con el uso de insecticidas”, apuntó el productor y ex pre­sidente del Patronato para la Investigación y Experimentación Agrícola del Estado de Sonora (Pieaes).

PROPUESTAS

Morales Valenzuela manifestó que es necesario salir del paradigma del paquete tecnológico de la revolución verde, hacia una agricultura sostenible, a través de la agroecología.

Se tiene que partir de esto para acabar con la contaminación del aire, agua y suelo y se está avanzando, hay más investigación sobre el manejo agroecológico de plagas y enfermedades, así como un mayor número de productores involucrados en el cambio, actualmente se tienen cien cultivos orgáni­cos certificados en 512 mil hectáreas, ade­más que hay mayor demanda de productos agrícolas libres de agrotóxicos, en México y el mundo.