Soluciones para la sequía

Gobiernos del mundo iniciaron un peregrinaje en busca de soluciones para satisfacer las necesidades humanas para acceder al vital líquido

Por: Manuel Borbón Morales

La sequía llegó para quedarse, al menos así parece indicarnos el porvenir en nuestra región, ya que, así como nos ha sucedido en el pasado, sobre todo, a finales de la década de los años noventa y a principios de siglo, la sequía es un fenómeno climático cíclico, es decir, es provocada por temas de la naturaleza cada cierto tiempo, sin embargo, temas como la sobrepoblación, la contaminación, el cambio climático, entre muchos otros, han generado que dichos efectos cíclicos se vuelvan más frecuentes no solo en el Valle del Yaqui, sino a nivel mundial, provocando sequías más profundas y, en su momento, lluvias menos frecuentes pero sí más devastadoras.

Es por lo anterior que, gobiernos en todo el mundo han comenzado un verdadero peregrinaje en buscar posibles soluciones para satisfacer las necesidades humanas para acceder al vital líquido, ya que, como todos sabemos, no solamente es el agua que se consume diariamente en el hogar, sino que también, hablamos del agua necesaria para uso agrícola e industrial, lo cual, vuelve aún mayor el reto a enfrentar de las autoridades ante una necesidad de agua en aumento y, obviamente, una menor disponibilidad de la misma.

Actualmente el tema ha sido el pan de cada día en el Valle del Yaqui, ya que, después de que la temporada de lluvias no satisficiera las necesidades mínimas de la región, diversos sectores se han visto amenazados por los posibles efectos que esto podría traer, principalmente el área agrícola, ya que, si observamos los números, según datos del Distrito de Riego el sistema de la Cuenca del Río Yaqui, el cual comprende las presas de La Angostura, El Novillo y, El Oviáchic, se encuentran a un 18% de su capacidad, lo cual significa 1,183 millones de metros cúbicos menos que el año pasado. Para entender lo que esto implica, en el Valle del Yaqui, se utilizan cerca de 2 mil millones de metros cúbicos de agua superficial para satisfacer las necesidades hídricas del sector primario, por lo cual, según el propio Distrito de Riego se dejarán de sembrar alrededor de 160 mil hectáreas en el actual ciclo agrícola, lo que traería como consecuencia según la Cámara Nacional de Comercio en Cajeme (CANACO), un total de 16 mil millones de pesos menos circulando en nuestra comunidad, con consecuencias que podrían ir desde la pérdida de empleos, cierre de empresas, hasta el aumento en delitos como el robo.

Debido a lo anterior, se vuelve necesario que, tanto la iniciativa privada, como el gobierno, tomen cartas en el asunto para resolver un tema que parece comenzar a ponerse color de hormiga, amenazando con poner en jaque a una ciudad completa que, por vocación y cultura se encuentra ligada de manera permanente a las labores de la agricultura.

Por lo tanto, a continuación, se enlistan algunas posibles soluciones que, tropicalizadas al caso cajemense, han funcionado en diversas partes del mundo con problemas similares al nuestro tales como Las Vegas, el Valle de San Quintín, entre otras:

1.Tecnificación de sistemas de riego, en nuestra región cerca del 90% del agua disponible se utiliza en la agricultura, por lo cual, ahondar en la posibilidad de sistemas de riego como el de goteo y aspersión, generaría el 40% de ahorro en el uso del agua.

2.Pacto con industria, el nuevo gobierno ha hecho un llamado a las grandes industrias para comenzar a tejer alianzas en búsqueda de eficientar y disminuir su consumo del agua privilegiando el consumo humano de la misma, por lo cual, en nuestra región ahondar en la búsqueda de soluciones con empresas como Constellation Brands es de vital importancia.

3.Cultura del cuidado del agua, en Cajeme un ciudadano promedio consume alrededor de 400 litros de agua al día, mientras que organismos internacionales nos hablan de que el consumo sostenible debe rondar los 200 litros diarios.

4.Cuidado del medio ambiente, además de cuidar el uso del agua, es importante comenzar a sembrar árboles y contaminar menos nuestros suelos para poder tener mayor disponibilidad de agua hacia el futuro.

Las anteriores, entre muchas otras propuestas que han funcionado en diversas regiones del mundo, deberán ser puestas sobre la mesa para poder tener un verdadero acuerdo a largo plazo que nos coloque en el camino de las oportunidades.

borbonmanuel@gmail.com