Se esperaba que en la conferencia del gobernador salieran respuestas, por ejemplo, a por qué se fue una inversión de 80 millones de dólares
Por: Francisco González Bolón
Mientras una gran inversión en dólares se va de Sonora, las muertes se convierten en pan de cada día en Cajeme o en San Luis Río Colorado los funcionarios públicos, incluido el alcalde Santos González Yescas, se ensañan contra una dama regidora, en las conferencias de prensa del gobernador Alfonso Durazo Montaño la zalamería va cabalgando sin pudor alguno. Si alguien cree que “domesticar” reporteros o medios de comunicación es la mejor forma de gobernar, pues sencillamente no se ha dado cuenta de los nuevos tiempos de este país, en el que la pluralidad campea a pesar de los intentos por acallar voces desde las principales tribunas. Muchos esperaban que de la conferencia de prensa del mandatario estatal salieran respuestas a interrogantes como “por qué se fue de Sonora una inversión de 80 millones de dólares”, por ejemplo, o, cómo visualiza el que funcionarios como Aarón Grajeda, por más que sean sus primeros 50 años, realice fiestas de “fifí”, cuando se supone que estamos en épocas de austeridad y, además, “no somos iguales” a los que se fueron. O bien, cómo es que, con todo y maquillaje, las cifras del crimen están ya tatuadas en la mente del colectivo social y se percibe a Sonora como una entidad violenta sin que las famosas “mesas de seguridad” puedan detener que un día sí y el otro también, las calles de Cajeme se tiñan de rojo. O es que acaso, como en un reciente reportaje televisivo se alcanzó a ver, a los soldados solamente se les coloca en la primera línea de combate mientras que en los altos niveles del Gobierno los acuerdos con el crimen no cesan ni un instante. Porque, por ejemplo, en Ciudad Obregón se observa cómo, a pleno rayo del sol, los militares están en los retenes solamente sirviendo como agentes de Tránsito porque seguramente a los criminales ya se les avisó que no pasen por ahí. Y mientras tanto, en la ciudad o sus comunidades, hay personajes que quieren en renta lujosas mansiones, pero a la hora de dar sus “generales”, son nombres falsos, pero quieren obligar a que se les acepte el pago solamente en efectivo, como para blanquearlo, o bien se apoderan a algunas casas vacías y desde ahí dirigen sus operaciones en barrios y colonias. Seguramente la inteligencia militar ya sabe de esos “movimientos raros”, pero no actúa porque se puede ir el gran negocio del sexenio y solamente acatan aquellas voces que les dicen “hay que respetar a los delincuentes porque ellos son seres humanos a los cuales hay que respetarles sus derechos”. Seguramente en esos derechos piensan los malandrines cuando mandan a las calles toneladas de drogas que envenenan cada día a más niños y jóvenes. Tampoco se escuchó al Gobernador hablar de cómo todo un Ayuntamiento se ha puesto en contra de la regidora Rebecca Ching Hurtado, en San Luis Río Colorado, mientras en los discursos se habla de que debe eliminarse la violencia, sea política o de género. En sus redes sociales, la Edil de Morena denunció: “Me vi forzada a interponer una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción del Estado, contra el alcalde Santos González Yescas y demás funcionarios de San Luis Río Colorado por el mal uso que le están dando a la dependencia de Contraloría Municipal, pues la utilizan como un instrumento de venganza hacia mí por haber denunciado la Violencia Política de la que soy objeto desde más de 1 año, llegaron hasta el grado de sancionarme económicamente dos veces y me amenazan con hasta 36 horas de cárcel si vuelvo a hablar del tema, por el simple hecho de defenderme, si esto me hacen a mí que soy una regidora, ¿qué justicia pueden esperar los ciudadanos cuando van a Contraloría a presentar alguna queja contra policías o algún funcionario público?”. De ese tamaño el problema cuando hay alcaldes que se sienten caciques, amos y señores de vidas y haciendas en sus terrenos, pero, como González Yescas, se hacen los que no saben cuándo se les cuestiona cómo es que ante su propia vista operaba un bar sin licencia ni instalaciones adecuadas y lo cual derivaría en una tragedia de la cual la sociedad sanluisina no termina aún de reponerse. Ahí es preciso que el gobernador fije una postura y, sin herir la autonomía municipal, indique cómo debe ser el actuar de los funcionarios que llegaron al poder por Morena, pues con las actitudes del alcalde sanluisino, lo único que se está logrando es que lo ganado por ese partido en unas elecciones se vaya a la basura en las siguientes. Sonora merece respuestas no que los problemas se oculten. Y una política de Comunicación Social carecerá de efectividad mientras a los Lords Moléculas se les deje lamer suelas mientras a los verdaderos periodistas se les niegue la oportunidad de preguntar. Si Sonora quiere ganar espacios democráticos, por ahí se debe empezar: por una comunicación transparente y efectiva, no de halagos ni represiones. Ya bastante de eso se tuvo con los gobiernos pasados. Hoy los medios de comunicación requieren, también, de la transformación y no de la simulación. Comentarios: