Problema en Huatabampo
Por: Gerardo Armenta
Más allá de las formas o actitudes festivas que recién se vivieron con el tránsito de un año a otro, en el sur del Estado existen problemas de carácter público que obviamente ameritan ser resueltos. Y en tanto que no sucede así, es por eso que no dejan de llamar la atención. Aunque lo ideal sería que lograran solución y sus protagonistas zanjaran las diferencias que haya en juego, que no deben ser pocas.
Es el caso, por ejemplo, de la regiduría étnica de Huatabampo que sigue sin elegirse en un contexto de aparente "normalidad". La pregunta sería por qué están las cosas así. Pero la respuesta se pierde en una bruma que no es fácil despejar objetivamente de buenas a primeras. Según se sabe, se han realizado cuatro intentos para zanjar el asunto. Todos han fracasado, por lo que el Cabildo de Huatabampo sigue sin regidora étnica. Al parecer, tiene que ser una mujer.
No se advierte del todo creíble que la condición femenina a que se alude pueda ser la causa del problema. Sería el colmo en estas alturas. Pero sin duda hay algo en este contexto que ha impedido llevarlo adelante. Y solucionarlo. Empero, las cosas allí deben ser bastantes radicales o peligrosas, quizá en grado un tanto extremo. Juzgue usted: el Instituto Estatal Electoral abandonó su papel en la elección respectiva en octubre anterior, al señalar que no existían condiciones de seguridad para su personal, en virtud de las diferencias entre los cuatro grupos que pelean la regiduría étnica de Huatabampo.
Increíble pero cierto. Episodios de esta naturaleza no deberían ocurrir en el esquema de luminosa madurez o civilidad política en que presumiblemente hoy se vive. No es así, por supuesto. Los vicios de antaño siguen siendo los de hoy. Llama igualmente la atención la querella existente entre los cuatro grupos indígenas que pelean el cargo edilicio a que se hace mención. En Huatabampo curiosamente hay cuatro gobernadores de la Etnia Mayo. ¿Por qué nadie los convence de que aporten su mando o poder para zanjar el problema?
La pregunta anterior parecería real o francamente ociosa. Es o debe ser obvio que el conflicto a que se alude no surgió por generación espontánea o cosa parecida. Deben ser poderosos los ánimos en choque. Porque no ha de resultar fácil entender que hasta ahora, tras cuatro intentos por lograrlo, no se haya podido llevar a cabo el mecanismo para elegir a la regidora étnica de la Tierra de los Generales. Es obvio que, fuera de ese contexto, se han producido y se producen procesos electorales a veces en extremo complicados, pero que terminan por llegar a buen puerto.
¿Por qué en el caso que nos ocupa no ha sido así? La pregunta parecería ser o es un tanto ociosa. Son los intereses divergentes que existen en la Etnia Mayo los que por lo visto obstaculizan la serenidad del mecanismo electoral que allí se tendría que llevar a cabo, en tanto que se trata de un proceso en beneficio propio. A veces, sin embargo, la razón suele batallar para acreditarse, no sólo en ese ámbito. Cuando eso ocurre, es obvio que tendrá que haber problemas de por medio.
Abel Ramírez Torres, dirigente de la agrupación Jiapsi Yoreme Mayo, dijo: "Es lamentable que tengamos muchos meses sin poder elegir a quien nos representará en el Cabildo". Y añadió: "Seguimos sin representatividad. No hay nadie que levante la voz por nosotros". Vale considerar un dato de primer orden: la Etnia Mayo representa el 63% de la población total de Huatabampo. Procede también insistir con una pregunta: ¿Por qué no se ha resuelto el problema de la regiduría étnica en ese municipio? Parecería que la solución está en una elección abierta o en una por delegados.
Así planteó también lo anterior Ramírez Torres. No debería ser nada del otro mundo optar por cualquiera de esos mecanismos. Obviamente hablando en condiciones normales o tersas. Pero por lo visto condiciones de este tenor no existen en el ámbito de la Etnia Mayo de Huatabampo. Tampoco se advierte en el horizonte quién será el valiente que se encargue de apaciguar ánimos, y lograr que impere la serenidad en la etnia para llevar a cabo la elección que es preciso ejercer en un tiempo razonable. Si dejan pasar los días y los meses, entonces puede llegarse a la conclusión de que en Huatabampo no hay necesidad de que exista la regiduría étnica, lo cual, por supuesto, habría que tomar como un soberano contrasentido.
armentabalderramagerardo@gmail.com