Este es el mundo globalizado

Una manifestación más precisa hoy en día, es el Internet y las nuevas tecnologías de telecomunicación

Por: Mario Saucedo Gómez

Muchas veces cuando se lee y escucha que México forma parte del mundo globalizado, se piensa que todo gira alrededor del intercambio de mercancías y que sólo en eso es su participación.

Y no está muy lejos de ser verdad, pero el modelo de globalización va más allá de sólo comprar y vender productos, porque también participa en lo económico, en lo social, político cultural y lo tecnológico.

Lo que hace que se manifieste un proceso de integración e interacción progresiva entre los países, las personas y las instituciones integrados en este modelo.

Y una manifestación más precisa hoy en día, es el Internet y las nuevas tecnologías de telecomunicación, que ponen en contacto a poblaciones y mercados distantes.

Este modelo de globalización que hoy se vive, se origina en el año 1980 en los Estados Unidos y logra ser extendido hasta Europa, América Latina y Asia donde a pesar de los avances todavía continúa.

Y una señal muy reciente todavía de su permanencia en el mundo, lo vino manifestar el denominado "lunes negro", que desestabilizó mercados y sistemas financieros.

Lo que dio a entender de forma muy precisa, que el modelo de globalización todavía está presente en el mundo y que ésta vino a ser una importante forma de indicarlo.

Con un claro mensaje de que todos los países que se encuentran dentro del modelo global, tienen los beneficios y los efectos que le suceden a cualquier economía que esté integrada en este modelo.

Que por cierto estos beneficios y efectos no le llegarían a una economía cerrada como existían anteriormente en el mundo, como estaba la de México antes de ingresar al GATT, que fue su primer paso.

Hoy se vive esta forma de vida, conectado México con la mayoría de las economías del mundo hace que le llegue la inversión extranjera directa y hoy en día le esté llegando la relocalización de empresas.

Lo que no deja de ser bastante positivo para el crecimiento y desarrollo del país, todo lo que llega con su participación en el modelo global generando empleo para los estados mexicanos.

Pero también habrá que decirlo, que todo está bien menos que llegue una situación como de días pasados, donde la paridad peso- dólar, se subió a niveles mayores a los veinte pesos.

Que probablemente no sería tan negativo para algunos, pero como también esta globalizado el mercado de materias primas, las que vienen del exterior hacen que se muevan los precios en el mercado interno.

Es real porque al moverse la paridad se mueve el mercado de bienes y servicios a nivel nacional y en estos tiempos de lucha contra la inflación, hace que el poder de compra general disminuya.

Lo que hace que ese sea uno de los efectos negativos de la globalización que no ayuden al crecimiento de la economía, independientemente si el comportamiento del gasto público federal es el correcto.

Porque cuando se desconocen los alcances del modelo de la globalización, se piensa que el deslizamiento de la moneda es por causas locales en el manejo de la economía.

Es cierto que el modelo de la globalización es positivo, porque aporta crecimiento y desarrollo de los países, pero beneficiaria su objetivo prioritario fuera la sociedad y posteriormente la economía.

DEL ESCRITORIO

Se comenta que probablemente exista recesión en la economía de los Estados Unidos, en el siguiente año y que viene a ser nada más que un crecimiento económico negativo en sus sectores productivos y que es de analizarse el efecto del nearshoring que generó el establecimiento de sus empresas en Asia y podrá verse si se recupera rápido su Producto Interno Bruto...Por lo que se está conociendo del próximo Gobierno de la presidenta electa CLAUDIA SHEINBAUM PARDO la conectividad ferroviaria de todas las regiones del país será una de los pilares de sus planes a realizar...Es real aunque no se quiera ver así, el movimiento que realice el Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos, será pauta para que el Banco de México mueva las tasas de interés, entendiendo la dependencia de la economía mexicana a la estadounidense.