División yaqui y Regino Montes

Por: Redacción

El pasado lunes, a eso de las 13:03 horas de la Ciudad de México, en las oficinas de la Dirección General del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) se sellaba de recibido una carta de las autoridades yaquis del pueblo de Vícam que desnuda la gravedad de los problemas al interior y pronostican la posibilidad de que el llevado y traído Plan de Justicia ni siquiera nazca.

El gobierno de la primera cabecera de los ocho pueblos yaquis, encabezado por San Martín Coronado Flores, de la corriente encabezada por Mario Luna Romero, hizo saber a Adelfo Regino Montes, el mandamás en INPI, su inconformidad porque se le ha dado juego en los últimos meses a quien “no puede ser considerado como autoridad ni mucho menos otorgarle facultades de representación de nuestros pueblos que nadie les ha conferido”.

Y es que, como se sabe, las autoridades tradicionales deben ser ocho, una por cada pueblo, pero se ha llegado el momento en que el gobierno civil ha debido escuchar hasta a 20 representaciones que son consideradas como “autoridades espurias o duales”, derivadas de los procesos de división que desde la década de los noventas se iniciaron, patrocinados desde los gobiernos federal y estatal.

Hasta el momento, el jueguito de divide y vencerás le ha dado resultado a los gobernantes yoris porque de esa manera escamotean los apoyos para la Tribu Yaqui.

Los indígenas tienen un proceso muy bien definido para elegir a sus autoridades, entre el 12 de diciembre y el 6 de enero, y solamente quienes son consagrados y tienen en su poder la vara de mando, pueden ser considerados como los auténticos gobernantes.

Por eso, en la carta, también enviada a Julio Scherer Ibarra, Consejero Jurídico de la Presidencia de la República, los de Vícam reclaman:

“Al otorgarle usted representatividad a personas y grupos que usurpan las funciones de autoridad por el simple hecho de ejercer acciones de presión desplegando actos delictivos para obtener ganancias personales, que de ninguna manera solaparemos, está usted pisoteando la integridad de nuestras instituciones que hemos mantenido durante siglos, resistiendo discriminación, despojo, deportaciones, agresiones, crímenes que llegaron al genocidio y que son la principal expresión del fortalecimiento de nuestra cultura, identidad, unidad y posicionamiento de auténtica lucha en la defensa de nuestros derechos y bienes patrimoniales, provocando con su actitud división entre nuestros hermanos”.

No es, el de los yaquis, cualquier reclamo ni las autoridades federales deben echarlo a la basura porque el proceso para definir el Plan de Justicia prometido, puede enturbiarse de nuevo dar al traste el nacimiento de este programa que, si trae buenas intenciones, puede desembocar en anularlas por un simple desconocimiento de las costumbres indígenas.

Según los yaquis de Vícam, “es el inicio para terminar, de una vez por todas, con personas y grupos que usurpan los mandos de nuestra Nación haciéndose pasar como autoridades, lo que nos debilita, confunde a autoridades del gobierno y a la opinión pública, divide a nuestro pueblo y nos han causado  mucho daño”.

Por lo tanto, Regino Montes está invitado a comparecer ante la Guardia Tradicional de Vícam para el próximo domingo 30 de agosto, a las 12:00 horas, a fin de que explique y justifique a satisfacción ante el pueblo, las razones de su conducta.

En buen embrollo se ha metido el titular del INPI. Ojalá y tenga la voluntad suficiente para solucionar esta situación que podría derivar en que por fin la unidad de los ocho pueblos se logre.

Es una oportunidad histórica que no puede desperdiciarse.

Comentarios: franciscogonzalez.bolon@gmail.com