Este fenómeno puede estar relacionado con una variedad de factores, desde el estrés hasta trastornos del sueño más serios
Por: César Omar Leyva
Despertarse a las 3 de la madrugada es una experiencia frustrante que afecta a muchas personas. Aunque pueda parecer un evento aislado, este fenómeno, conocido como despertares nocturnos, puede estar relacionado con una variedad de factores, desde el estrés hasta trastornos del sueño más serios.
Según el neurólogo Alejandro Anderson de la Universidad de Buenos Aires, el estrés puede alterar significativamente nuestro sueño. "El estrés crónico puede llevar a un aumento en los niveles de cortisol, la hormona del estrés, lo que puede interrumpir el ciclo de sueño-vigilia y causar despertares frecuentes, especialmente en las primeras horas de la mañana", explica Anderson.
ASÍ INFLUYEN LOS TRASTORNOS DEL SUEÑO
Además del estrés, diversos trastornos del sueño pueden contribuir a los despertares nocturnos. La apnea del sueño, por ejemplo, se caracteriza por pausas en la respiración durante el sueño, lo que puede provocar despertares frecuentes y fragmentación del sueño. El insomnio, otro trastorno común, se define como la dificultad para conciliar o mantener el sueño, y puede manifestarse con despertares tempranos.
Además, cita el especialista, los hábitos de vida tienen un alto nivel de influencia en las personas que no pueden dormir una noche completa. Ya que el consumo de cafeína o alcohol y la exposición a la luz de las pantallas antes de dormir pueden afectar la calidad del sueño.
Enfermedades como el reflujo gastroesofágico, las alergias y el dolor crónico también pueden interrumpir el sueño y en las mujeres los cambios hormonales juegan un papel en contra a la hora de intentar descansar por la noche.
ACCIONES QUE AYUDAN A MEJORAR LA CALIDAD DEL SUEÑO
- Establecer una rutina: Ve a la cama y levántate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
- Crear un ambiente propicio: Asegúrate de que tu dormitorio sea oscuro, tranquilo y a una temperatura cómoda.
- Reducir el estrés: Practica técnicas de relajación como la meditación.
- Limitar la exposición a las pantallas: Evita usar dispositivos electrónicos al menos una hora antes de dormir.
- Hacer ejercicio regularmente: La actividad física regular puede mejorar la calidad del sueño, pero evita hacer ejercicio intenso justo antes de acostarte.
- Consultar a un profesional: Si los despertares nocturnos persisten, es recomendable consultar a un médico o especialista del sueño para descartar cualquier condición médica subyacente.
Los despertares nocturnos pueden tener múltiples causas y encontrar la solución adecuada requiere identificar los factores desencadenantes en cada caso particular. Al adoptar hábitos saludables y, si es necesario, buscar ayuda profesional, es posible mejorar significativamente la calidad del sueño y disfrutar de un descanso reparador.