Conoce la regla del 60 para evitar afectaciones por la constante utilización de equipos de sonido individual
Por: César Omar Leyva
El uso prolongado de audífonos se ha convertido en una práctica cotidiana entre adolescentes y adultos jóvenes, pero pocas personas consideran los daños auditivos que esto puede causar.
Expertos advierten que escuchar música a volúmenes elevados y durante largos periodos aumenta el riesgo de pérdida auditiva prematura.
¿CÓMO AFECTAN LOS AUDÍFONOS A LA AUDICIÓN?
Los audífonos, en especial los intrauriculares, envían el sonido directamente al canal auditivo sin la protección natural que ofrece la oreja. Esto puede provocar daños en el tímpano y, con el tiempo, generar pérdida auditiva irreversible.
Además, la acumulación de suciedad y bacterias en estos dispositivos incrementa el riesgo de infecciones en los oídos.
Según la otorrinolaringóloga Karina Ayala López, en México, dos de cada diez personas presentan algún tipo de discapacidad auditiva. El problema es cada vez más frecuente entre los jóvenes, debido al uso inadecuado de audífonos y la exposición a ruidos excesivos.
LA REGLA DEL 60: CLAVE PARA PROTEGER LA AUDICIÓN
Los especialistas recomiendan seguir la "regla del 60" para reducir el riesgo de daño auditivo:
- No escuchar sonidos a más del 60 por ciento del volumen total del dispositivo.
- No utilizar audífonos por más de 60 minutos continuos.
Además, es recomendable optar por audífonos de diadema en lugar de los intrauriculares, ya que estos últimos exponen directamente el canal auditivo al sonido.
También se aconseja evitar ambientes con ruido superior a los 90 decibeles, como conciertos o eventos con música muy alta.
Si después de una exposición a ruidos fuertes se experimenta zumbido o molestias en los oídos, es importante acudir con un especialista para una valoración. La prevención es la mejor forma de cuidar la audición y evitar daños irreversibles.