Jorge Glas, quien ocupó el cargo de vicepresidente en Ecuador entre 2013 y 2017, enfrenta una orden de prisión por presunto peculado
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
El gobierno ecuatoriano ha solicitado formalmente a la Embajada de México en Quito autorizar el ingreso de las fuerzas policiales a su sede diplomática para llevar a cabo la captura del exvicepresidente Jorge Glas.
El exfuncionario, quien enfrenta acusaciones de desviar fondos públicos destinados a la reconstrucción de poblados costeros después de un devastador terremoto, se refugió en la embajada mexicana el pasado 17 de diciembre para evitar su arresto.
La Cancillería ecuatoriana emitió un comunicado en el que expresaba su petición, destacando que la medida se realiza en cumplimiento de la disposición de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador.
"La cancillería ha solicitado a la Embajada de México el consentimiento para que las fuerzas del orden puedan dar cumplimiento a la disposición de la Corte Nacional de Justicia de capturar al ciudadano Jorge David Glas Espinel", anunció el Ministerio de Relaciones Exteriores.
SOLICITÓ ASILO POLÍTICO A MÉXICO
Jorge Glas, quien ocupó el cargo de vicepresidente entre 2013 y 2017, enfrenta una orden de prisión por presunto peculado, delito que conlleva una pena de hasta 13 años de cárcel.
El exvicepresidente ha solicitado asilo político a México, sin embargo, las autoridades ecuatorianas han anticipado su negativa a otorgarle un salvoconducto en caso de que dicho asilo le sea concedido, argumentando que se trata de una investigación penal en curso.
Por su parte, la defensa de Jorge Glas argumenta que el asilo político garantizaría su integridad física, especialmente ante las condiciones de inseguridad en las cárceles ecuatorianas, donde se reporta un alto índice de mortalidad.
ACUSACIONES
Las acusaciones contra Glas incluyen su presunta participación en el desvío de fondos recaudados para la reconstrucción de zonas afectadas por desastres naturales.
Se estima que el gobierno ecuatoriano recaudó alrededor de mil 614 millones de dólares de aportaciones obligatorias y aumentos temporales de impuestos, destinados a este fin.
Además de estas acusaciones, Jorge Glas fue condenado en diciembre de 2017 a seis años de prisión por su implicación en la trama de corrupción de la empresa brasileña Odebrecht. Sin embargo, en 2022 fue liberado bajo libertad condicional.