El extraño incidente se registró el domingo, mientras los feligreses esperaban que se celebrara la misa; no supieron cómo actuar
Por: Edel Osuna
Como se recordará, la tarde de ese día, mientras los fieles esperaban celebrar la misa de la Octava del Carmen de los Realejos, un hombre con un niño de aproximadamente dos años de edad, irrumpió en el recinto religioso.
De pronto, por todo el pasillo central el sujeto se echa a correr con el nene encima; pasa a toda velocidad y llega al altar, donde sube al infante y algunas personas intentaron detenerlo.
Sin embargo, el hombre pudo escabulle de entre las manos y sube también al altar, toma al menor y lo coloca en la parte más alta, a los pies de la Virgen del Carmen.
Deja al confundido pequeñito en el altar, se baja del sitio y se marcha como entró: corriendo a toda velocidad.
¿QUÉ PASÓ CON ÉL?: LO QUE NO SE VIO
Y aunque pareciera que el sujeto abandonó al nene, de acuerdo con el medio español Avisos, algunos de los feligreses que están cerca de la salida lo detuvieron, para que no dejara al niño solito.
El rotativo narra que uno de los asistentes a la iglesia tomó al niño en brazos, quien estaba muy sorprendido por el acto.
Y aunque no se conoció el motivo que el hombre tuvo para su actuar, al parecer estaba fuera de sí, ya que no podía controlarse, pues cometido el hecho, caminó por los pasillos del templo santiguándose.
Luego, el hombre comenzó a orar y después se arrodilló frente al altar y pidió perdón, acto que fue aplaudido por los asistentes a misa.
Asimismo, señaló que pese a que se desconoce por qué lo hizo, su comportamiento errático mostró que mentalmente no estaba buen, ya que, antes de abandonar al niño en el altar, se santiguaba compulsivamente.