Estados Unidos aprueba a Elon Musk pruebas de chips cerebrales en humanos

Tres años luchó el dueño de Neuralink, Tesla y SpaceX para que la FDA avalara esta fase, que promete devolver la movilidad a discapacitados

Por: Edel Osuna

Tras una intensa batalla para que le fueran aceptadas, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos aprobó a Neuralink la implantación de chips cerebrales en fase de prueba.

La empresa del multimillonario Elon Musk pasó la barrera más importante previo a iniciar la distribución y comercialización al público del dispositivo en humanos.

Pese a las críticas, los ensayos de implantes cerebrales en humanos son aprobados, luego de que estos fueran puestos a prueba en monos.

“¡Nos complace anunciar que hemos recibido la aprobación de la FDA para lanzar nuestro primer estudio clínico en humanos!”, escribió Neuralink en su cuenta de Twitter.

La empresa con sede en California agregó: “Este es el resultado de un trabajo increíble realizado por el equipo de Neuralink en estrecha colaboración con la FDA, y representa un primer paso importante que algún día permitirá que nuestra tecnología ayude a muchas personas”.

Señala que se hará un reclutamiento para los ensayos clínicos, pero que aún no son abiertos al público, pero que se hará pronto.

Como se recordará, Neuralink es una de las empresas de Musk, junto con la aeroespacial SpaceX y la automotriz Tesla, que busca que un chip interactúe con el cerebro humano, capaz de permitir la movilidad en músculos atrofiados, según su búsqueda inicial o para quienes sufren otros males neurológicos.

Durante la presentación que Elon hizo en diciembre en Neuralink, dijo que trabajan duro para estar preparados para el primer implante humano; sin embargo, que deben ser extremadamente cuidadosos a fin de estar seguros de que funcionará bien.

Estos chips permitirán que el ser humano interactúe con la inteligencia artificial (IA), dijo durante el discurso anual en 2020.

Los primeros prototipos (que tienen tamaño de una moneda) fueron implantados en monos, que fueron capaces de jugar videojuegos o "escribir" en una computadora con sólo mover el cursor con la mirada.

Pese al éxito, activistas en defensores de los derechos de los animales acusaron a Musk de someter a los simios a “extremo sufrimiento” por años de experimentos.

Y es que, supuestamente, el mono del fue encontrado sin algunos dedos en las manos y los pies; se cree que se automutiló; posteriormente fue asesinado, como parte de la fase terminal del experimento.