Investigaciones revelan que realizar esta actividad con periodicidad podría no ser tan beneficiosa como se pensaba inicialmente
Por: Araceli Rodríguez
Expertos de la Universidad de Harvard han realizado un estudio enfocado en la frecuencia de cuantos baños diarios toman las personas, revelando que podría no ser tan beneficiosa como se pensaba inicialmente. Según un reciente estudio, bañarse todos los días, especialmente con agua caliente, puede eliminar elementos esenciales de la piel, conduciendo a problemas como:
- Sequedad
- Irritación
- Proliferación de bacterias resistentes
Robert H. Shmerling, uno de los autores del estudio, advierte que los baños diarios no solo no mejoran la salud, sino que también pueden tener efectos negativos en la piel y resultar en un desperdicio innecesario de agua.
Los expertos ahora sugieren que bañarse dos o tres veces por semana podría ser suficiente para la mayoría de las personas, siempre y cuando se mantenga una rutina diaria de higiene. Además, enfatizan la importancia de elegir jabones suaves y naturales para evitar dañar la piel.
CONSEJOS SEGÚN LA EDAD
La Dra. Sylvie Meaume, dermatóloga reconocida, destaca que las necesidades de higiene cambian con la edad. A medida que envejecemos, la piel tiende a volverse más seca y menos capaz de producir sebo, lo que hace crucial espaciar los baños. Para las personas mayores de 65 años, se recomienda bañarse con agua todos los días, pero usar jabón solo cada tres días. Es fundamental prestar especial atención a zonas clave como las axilas y las partes íntimas.
Meaume subraya que el equilibrio adecuado entre higiene y cuidado de la piel depende de factores individuales como la edad, el tipo de piel y las condiciones ambientales. La elección de productos suaves y naturales es esencial para mantener la integridad de la piel a lo largo del tiempo.
Adaptar la frecuencia y el tipo de baño según las necesidades individuales y la etapa de la vida de cada persona puede ser crucial para mantener una piel sana y evitar efectos adversos derivados del exceso de limpieza.