Para asumir el cargo, la “jurista” de mentiras robó la información de una amiga y la presentó como propia para hacerse de un puesto
Por: Edel Osuna
Una mujer fue sentenciada a prisión por haberse apersonado como abogada, cuando en realidad ni estudios que ampararan su profesión tenía; además, desempeñó un alto cargo en una Fiscalía.
Se trata de Claudia Elena Lozano Doria, quien fue condenada a 12 años de cárcel por usurpación de funciones, además de obtener cargos dentro de la dependencia con documentación falsa.
De acuerdo con el expediente, Claudia Elena laboró por 13 años en una instancia de impartición de justicia; entre sus atribuciones tenía al cargo la emisión de órdenes de aprehensión y cerrar expedientes judiciales.
De acuerdo con el caso, logró engañar a las autoridades al presentar documentación que “acreditaba” sus estudios, los cuales a la postre resultaron apócrifos.
ASÍ FUE DESCUBIERTA
De acuerdo con la pesquisa, la fémina fue descubierta al postularse para jueza de la Judicatura de Valledupar, en Colombia; cuando cotejaron la información, detectaron que estos eran falsos, que no tenía ni estudios ni registros como jurista, por lo que de inmediato se abrió una averiguación en su contra.
En el juicio, la autoridad demostró que Claudia Elena jamás cursó estudios de Derecho ni contaba con certificaciones para ejercer como abogada; además, se descubrió que usó documentos de una amiga, a la que suplantó la identidad, quien fue identificada como María Consuelo Mestre, quien sí estudió Derecho y laboraba en la Sección Judicial de Montería.
Para lograr su cometido, la estafadora copió el currículum de María Consuelo, y haciendo uso de su historial laboral, consiguió trabajar en la Fiscalía colombiana.
Claudia Elena Lozano Doria fue condenada a 12 años de cárcel por fraude procesal y falsedad en documento privado.