La divisa extranjera se sigue manteniendo fuerte en el mercado
Por: Luis Flores
La apreciación del dólar ha estado motivada por varias circunstancias, una de ellas es que en Estados Unidos el empleo ha ido creciendo más de lo esperado, por ello poco a poco se ha ido impulsando ganándole terreno al peso mexicano.
El alza de las tasas de interés en la economía norteamericana que se origina en la necesidad de controlar la fuerte inflación, ha sido mucho más robusta de lo que se ha visto en otras economías desarrolladas.
Adicionalmente, hay un factor relacionado con las expectativas de inflación que fortalecen aún más el dólar: se espera que el IPC en los Estados Unidos se reduzca de manera más acelerada que en otras partes del mundo, con lo cual quienes tengan títulos de renta fija denominados en dólares podrían verse beneficiados por su rápida valorización.
El aumento en Estados Unidos genera los incentivos para que los capitales salgan de los otros países, desarrollados y emergentes, hacia esa economía.
Este efecto se refuerza por el impacto sobre los precios de los commodities en la medida que una caída de estos aumenta los déficits en cuenta corriente y hace más vulnerables a los países que los producen.
CONSECUENCIAS
Ante el aumento de empleo en Estados Unidos, el peso perfila su tercera caída consecutiva, misma que se configura también en el aspecto técnico como una corrección alcista desde un mínimo de 16.6248 unidades que tocó el viernes, en un mínimo de casi ocho años, desde ese punto el peso cae 23.55 centavos o 1.42 por ciento.
Es importante señalar que la apreciación del dólar también genera impactos que son negativos para la propia economía de los Estados Unidos, debido a que encarece relativamente sus productos en el extranjero y abarata el costo de los productos de otros países, con lo cual se espera que el déficit comercial de ese país aumente y que esa economía crezca menos en el futuro.