Las presas del cuenca del Río Yaqui apenas alcanzan el 36% de su capacidad, reflejando una crisis hídrica en el esado de Sonora
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
La falta de lluvias y el bajo almacenamiento en las presas de la cuenca del Río Yaqui han colocado al sur de Sonora en una situación alarmante. Las principales fuentes de agua de la región apenas alcanzan poco más de un tercio de su capacidad total, lo que agrava el panorama para las comunidades y el sector agrícola que dependen de este recurso vital.
Al corte del día miércoles, 29 de octubre, el volumen conjunto de las principales presas de la cuenca del Río Yaqui alcanzó apenas 2,525.8 millones de metros cúbicos (Mm³).
NIVEL DE LAS PRESAS DEL RÍO YAQUI
De acuerdo con los datos más recientes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al corte del viernes 31 de octubre, el volumen conjunto de las presas Angostura, Novillo y Oviáchic alcanzó apenas 2,526.2 millones de metros cúbicos (Mm³), lo que representa solo el 36% de su capacidad total.
Aunque el registro supera en 1,180.4 Mm³ el volumen observado en el mismo periodo del año pasado, la falta de lluvias continuas mantiene una situación crítica para los municipios del sur de la entidad, donde la dependencia del Río Yaqui es fundamental para la producción agrícola y el suministro de agua potable.
ESTADO ACTUAL DE LAS PRESAS DEL RÍO YAQUI
Entre los tres embalses, se observan diferencias significativas en su nivel de almacenamiento:
- Presa Angostura: 454.9 Mm³, equivalente al 59.7% de su capacidad, con un aporte de 5.9 m³/s y sin lluvias recientes.
- Presa Novillo: 1,506.2 Mm³, lo que representa el 49.9% de su capacidad, con un aporte de 25.9 m³/s.
- Presa Oviáchic: 565.1 Mm³, apenas 17.5% de su capacidad, sin aportes ni precipitaciones registradas.
En conjunto, los tres embalses presentan un aporte total de 31.69 m³/s, cifra que se considera insuficiente para cubrir la demanda de agua en la región.
El bajo nivel de las presas amenaza no solo las actividades agrícolas del Valle del Yaqui, sino también el abasto de agua a comunidades urbanas y rurales. Autoridades locales y organismos de usuarios del agua han expresado preocupación ante la posibilidad de que, de continuar la falta de lluvias, se requieran medidas más drásticas de racionamiento en los próximos meses.