La edad puede influir en la aprobación de tu solicitud de tarjeta, ya que las instituciones financieras establecen requisitos mínimos
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
Iniciar el proceso para adquirir tu primera tarjeta de crédito es un paso emocionante hacia la independencia financiera.
Sin embargo, es común preguntarse a qué edad se puede solicitar una tarjeta de crédito sin enfrentar rechazos.
Por ello, a continuación abordaremos las preguntas más comunes sobre la edad mínima para obtener una tarjeta de crédito.
¿LA EDAD PUEDE SER MOTIVO DE RECHAZO AL SOLICITARLA?
La edad puede influir en la aprobación de tu solicitud de tarjeta de crédito, ya que muchas instituciones financieras establecen requisitos mínimos. En general, es necesario tener al menos 18 años para solicitar una tarjeta de crédito.
Además, a medida que avanzas en la vida adulta y construyes un historial crediticio, es posible calificar para tarjetas con múltiples beneficios adicionales.
Sin embargo, adquirir información previa sobre lo que debes saber antes de obtener tu tarjeta de crédito simplificará el proceso y reducirá las probabilidades de que tu solicitud sea rechazada.
¿CUÁL ES LA EDAD MÍNIMA PARA OBTENER UNA TARJETA DE CRÉDITO POR PRIMERA VEZ?
Si te preguntas "¿Puedo tener una tarjeta de crédito si soy estudiante?", la respuesta es "Sí", pero recuerda que la edad mínima para solicitar una tarjeta de crédito es de 18 años.
A esta edad, se presume que tienes la madurez financiera necesaria para manejar responsabilidades crediticias. Si cumples con este requisito, asegúrate de cubrir también los demás requisitos mencionados anteriormente para que el proceso de tu solicitud no se vea afectado negativamente.
¿Y HASTA QUÉ EDAD SE PUEDE SOLICITAR UNA TARJETA DE CRÉDITO?
De acuerdo con información de BBVA, algunos bancos permiten solicitar una tarjeta de crédito hasta los 74 años y 11 meses.
Si eres un adulto responsable y cumples con los requisitos financieros, puedes obtener una tarjeta de crédito a cualquier edad. La clave es demostrar que tienes la capacidad para administrarte de manera responsable.