Muere el primer actor Ernesto Gómez Cruz a los 90 años, esta fue su trayectoria

Considerado uno de los más grandes actores de México, aunque al inicio de su carrera él quería ser músico

Por: Susana Rodríguez

Los fanáticos del cine y la industria del entretenimiento en México lamentan la noticia del fallecimiento del primer actor Ernesto Cruz Gómez a los 90 años, conocido por su personaje en la película “El Infierno”.

Su deceso de ha dado a conocer en las redes sociales de la Asociación Nacional de Actores, quien extendió las condolencias a familiares, amigos y compañeros de la comunidad artística mexicana.

 

SU TRAYECTORIA

Ernesto Gómez Cruz, nacido el 7 de noviembre de 1933 en Veracruz, México, inició su carrera buscando ser músico desde temprana edad. Sin embargo, un giro inesperado lo llevó por otro camino.

Un amigo lo convenció de estudiar arte dramático. Decidió entonces mudarse a la Ciudad de México, donde obtuvo una beca en el Instituto Nacional de Bellas Artes. Ernesto se convirtió en uno de los actores más reconocidos de la industria.

En 1967, su talento dio sus primeros frutos cuando debutó en la icónica película "Los Caifanes", marcando el inicio de una prolífica carrera que abarcó más de ciento ochenta participaciones entre televisión y cine.

Películas en las que tuvo participación:

La llama de tu amor (1979)

El padre Gallo (1986

La fuerza del amor (1990)

El vuelo del águila (1994)

María José (1995)

El amor de mi vida (1998)

Hasta que te conocí (2016)

Maten al león (1977)

Cadena perpetua (1979)

Retrato de una mujer casada (1982)

Eréndira (1983), Crónica de una familia (1986)

El imperio de la fortuna (1986)

La ley de Herodes (1999)

El crimen del padre Amaro (2002)

Un mundo maravilloso (2006)

El infierno (2010)

La prima (2018)

RECLAMABA EL OLVIDO DE LOS ACTORES

Antes de que la pandemia transformara el mundo, Ernesto Gómez Cruz compartió en una entrevista emotiva sus sentimientos sobre el olvido y la falta de oportunidades laborales.

En 2019, a sus 85 años, la industria que una vez lo aplaudió parecía haberlo dejado atrás. "Vivo en una soledad terrible y abrumadora", confesaba el actor, cuya voz denotaba un espíritu aún ansioso por participar en nuevos proyectos, a pesar de enfrentar desafíos como la pérdida de memoria y la dificultad para recordar diálogos.

La realidad descrita por Gómez Cruz refleja un problema más amplio en el ámbito de las artes y el entretenimiento, donde el resplandor del estrellato no siempre garantiza seguridad o compañía en los años siguientes.

Buscó apoyo en figuras conocidas como el productor Juan Osorio, pero no encontró el respaldo esperado.

“Vivo en una soledad terrible y aplastante, que me tiene esperando el fin de mis días, aunque si surge algo nuevo con gusto seré uno de los primeros en apuntarme, aunque a este paso sólo espero la muerte, esa es segura que llega”, había manifestado el actor en la entrevista.