Julio César Chávez pide el fin de la violencia en Sinaloa

El legendario boxeador lamenta la situación en Culiacán y pide frenar el derramamiento de sangre

Por: César Omar Leyva

Julio César Chávez, ícono del boxeo mexicano, hizo un llamado a los grupos criminales que operan en Sinaloa para detener la violencia que ha sacudido a la entidad. Aunque evitó mencionar nombres específicos, su mensaje fue dirigido claramente hacia Los Chapitos y Los Mayitos, líderes de facciones en disputa.

En declaraciones breves a medios de comunicación, Chávez expresó su preocupación: "Culiacán está viviendo momentos muy difíciles". Señaló que el clima de inseguridad no solo afecta a los locales, sino que también ha atraído a personas de otras regiones que llegan "a robar, a saquear, a cometer cosas ilícitas; se están aprovechando de la situación".

NOVIEMBRE: EL MES MÁS VIOLENTO EN LA HISTORIA DE SINALOA

La crisis en Sinaloa se ha agravado en las últimas semanas. Noviembre cerró con 176 homicidios, superando el récord de 172 asesinatos registrado en el mismo mes de 2011. Esta alarmante cifra refleja la intensidad de los enfrentamientos entre grupos criminales en el estado.

LA RELACIÓN DE CHÁVEZ CON FIGURAS DEL NARCO

No es la primera vez que Julio César Chávez menciona su cercanía con el mundo del crimen organizado. En una entrevista de 2021 con Yordi Rosado, el exboxeador narró un encuentro en 1992, tras su triunfo ante Héctor "El Macho" Camacho, donde convivió con líderes de los cárteles más poderosos de aquella época, como Amado Carrillo (El Señor de los Cielos), los hermanos Arellano Félix y fundadores del Cártel de Sinaloa como Joaquín "El Chapo" Guzmán y Héctor "El Güero" Palma.

Chávez admitió que, en aquel entonces, su vida estaba marcada por el consumo de drogas. "Ese día estaba loco, quería perico, pero nadie traía. Había como 300 cabron*s armados y ninguno tenía lo que yo buscaba", recordó.

UN LLAMADO A LA PAZ

Hoy, lejos de esos episodios, Julio César Chávez alza la voz como figura pública para pedir paz en su estado natal. Su mensaje resuena en un momento crítico para Sinaloa, donde la sociedad clama por un alto definitivo a la violencia que afecta la vida de miles de personas.