Invita padre Beaumont a construir la paz desde cada quien
Por: Raúl Esparza
“La paz no es una imposición porque somos seres humanos que tenemos que hacer una reflexión intelectual y poner planes para el futuro y amar a las personas, no para cambiar al mundo pero si a los más cercanos”, declaró este viernes el padre David Beaumont.
El sacerdote dijo que tiene en su mente y su corazón en este tiempo de Navidad que el pueblo mexicano está enfrentando muchos retos en cuanto a los varios tipos de violencia, la primera cuando matan, lo que es bárbaro porque destruye la estructura de la vida familiar.
Otra es la destrucción del ambiente y con tristeza se ve la destrucción de los bosques no solo de los de Sonora sino de todo México y eso está afectando el futuro de la humanidad a nivel mundial.
Es un reto que, como persona de esperanza, se siente muy privilegiado de estar en Sonora con las comunidades originarias como son yaquis, mayos, pimas, guarijíos y seris.
Mencionó hace dos semanas estuvo en Navojoa, en la comunidad de Camoa, donde se elevó la primera misión del Estado de Sonora, para presenciar la inauguración del Centro de Peregrinos y Museo de Santa Catalina de Alejandría de Camoa, un lugar refugio de oración y a la vez para difundir la espiritualidad del pueblo Yoreme Mayo.
Dijo que va a la sierra de Álamos a visitar las comunidades de Mesa Colorada, Guajaray y la colonia Macurahue para llevar su mensaje de fe y esperanza.
El sacerdote vive en Yécora y en la parte que él recorre tienen un año sin ningún asesinato y siente estar muy en paz en cuanto a eso porque no sufre la gente como aquí en Ciudad Obregón, Empalme o Guaymas donde se da más fuerte la violencia.
Dijo que hace tres años inició una peregrinación por la paz con la imagen Kateri Tekakwitha, la primera santa indígena de Norteamérica, y la llevó a las comunidades Pima, Seri, Yaqui, y desde hace unos cuatro meses esa imagen está con los Yoreme-Mayo, en la comunidad de Buaysiacobe, en Benito Juárez.
“La paz no llega así nomás, es fruto de la justicia que consiste de una colaboración con Dios y con los demás y se tiene que luchar con los demás y planear la paz y poner nuestras vidas en orden y sobre todo amar a cada persona que Dios ponga en nuestro camino, y todos tenemos que poner nuestra parte porque la paz no es una imposición de una fuerza militar”, Padre David Beaumont