Afectaciones a ruleteros por la reducción de pasajeros y cierres de comercios
Por: Román González
Derivado de las afectaciones en la economía local, conductores de taxis colectivos, popularmente conocidos como "quinceros", reportan que, ante la baja afluencia de personas al primer cuadro de la ciudad, así como los cierres de comercios y despidos de empleados, el número de pasajeros que registraban al día se ha disminuido en un 20 por ciento.
Reynaldo Castillo López, presidente de la Fundación Carlos Madrazo, explicó que esta afectación se ha visto amortiguada gracias a los apoyos federales que reciben ciertos grupos de la población, lo cual ha mantenido un flujo constante de efectivo, pero que se vive una difícil situación.
"Afortunadamente, también llega el tope de los precios de los combustibles en 24 pesos promedio, por lo cual, algunos compañeros taxistas están aprovechando para llenar el tanque de sus vehículos, pero hay menos movimiento en el primer cuadro de la ciudad, se ven más establecimientos cerrados o con menos personal, lo cual nos afecta en el número de pasajes que movemos al día", señaló.
Añadió que los fines de semana es cuando más se nota esta baja de afluencia en la zona comercial del primer cuadro de la ciudad, así como que esta reducción en sus ingresos ha dificultado la actualización de sus unidades, requisito que se les solicitó por parte de las autoridades para una posible regulación de los taxis colectivos.
"En nuestra agrupación llevamos un avance del 70 por ciento en la actualización o trámite de obtener nuestra licencia de operador, pero estamos batallando por la adquisición de carros de modelos 2015 en adelante, pero estamos en la intención de cumplir con los requisitos que nos solicitaron", explicó.
Castillo López recordó que actualmente cuentan con permisos eventuales para los taxistas, los cuales son por una duración de un año, y ahora requieren adquirir los carros nuevos, ya que uno de los requisitos para las autorizaciones es que los vehículos tengan cuando mucho 10 años.
Explicó que, aun cuando se han realizado los esfuerzos de sus agremiados para la adquisición de las nuevas unidades, estiman que en los próximos meses se espera que se agudice la problemática económica, ya que históricamente en la época de cosecha es cuando se registra mayor movimiento de dinero, pero que, al dejarse de sembrar cerca del 80 por ciento de la superficie de siembra en la región, se verá la afectación en distintos giros de comercios y servicios.