Por: Eduardo Sánchez
María Dolores Hernández Gastélum, Gabriel Rojo Brambila y Brenda Lizeth Payán Manríquez, tienen algo en común: a sus hijos desaparecidos.
Ellos, acompañados de familiares y amigos, hicieron que los desaparecidos se escucharan, prestándoles su propia voz a través de consignas en una marcha pacífica por la paz de Cajeme, a la que convocó Nora Lira, madre de Fernanda Sañudo Lira, quien desde el 2 de octubre se encuentra en calidad de desaparecida.
La marcha tuvo poca respuesta, por lo que Gabriel Rojo Brambila, padre de David Alejandro Rojo Hernández, desaparecido el 23 de julio de 2013 y de 21 años de edad, reprochó con su voz quebrantada “pensé que vendrían más personas, así somos los mexicanos, apáticos, creemos que a nosotros nunca nos va a pasar algo similar, por eso tenemos un país hecho un cochinero”.
Ahí, cada padre, madre, familiares y amigos de personas desaparecidas, narraron su historia y pidieron a las autoridades de la Fiscalía General de Justicia, sólo una cosa: acelerar las investigaciones, que, en la mayoría de los casos, han hecho ellos por su propia cuenta.