Nuncio Apostólico pide unión al visitar Diócesis de Ciudad Obregón

Destacó la importancia de ayudar al prójimo con amor, sobre todo a los más necesitados, como las personas que se encuentran dentro de cárceles

Por: Javier Zepeda

A caminar en unión y fraternidad, así como a ayudar al prójimo con amor para buscar la paz ante los tiempos que se viven en la actualidad, invitó el Nuncio Apostólico, Joseph Spiteri, durante su visita a la Diócesis de Ciudad Obregón, donde hoy tuvo un encuentro con los sacerdotes de las diferentes parroquias, para seguir con su agenda de esta semana.

"¿Cómo nos ha amado el señor? Lo sabemos muy bien, ofreciendo su vida por nosotros en la cruz. Entonces, si nosotros queremos amarnos los unos a los otros como él lo ha hecho, tenemos que ofrecer nuestra vida por nuestros hermanos, claro, no significa que vamos a morir, a algunos, a los mártires se les ha pedido la vida, pero nosotros tenemos martirios más sencillos todos los días, los matrimonios, soportarnos unos a otros, también nosotros como sacerdotes u obispos tenemos que ponernos al servicio, a estar atentos a las necesidades de la comunidad, sobre todo de los más alejados", comentó.

El representante del Papa en México también estuvo presenta durante la Asamblea Diocesana, que se realizó los días 18 y 19 en Catedral, con la participación de servidores y grupos parroquiales. Reiteró que el Papa Francisco pide una Iglesia de puertas abiertas.

 "El Papa Francisco nos pide ser una Iglesia de puertas abiertas, para acoger a todos, tenemos que ser una Iglesia en salida, salir al encuentro, me da mucho gusto que en la Diócesis veo que salen hacia nuestros hermanos y hermanas en los reclusorios, no solamente en los asilos de ancianos, sino a estos hermanos y hermanas nuestras que se han equivocado", dijo.

En los Centros de Readaptación Social (Ceresos), dijo, se cuenta con capillas de adoración perpetua, que han construido las mismas personas que se encuentran dentro, acto que es una representación de la Iglesia en salida de la que se habla, es decir, aquella que no deja a nadie abandonado.

"Si no tenemos la capacidad de ofrecer testimonio de perdón, amor, reconciliación, ternura y unión nos llamarán mentirosos, el mundo dejará de tener fe en la Iglesia y en el señor", explicó.

El Nuncio Apostólico visitó el Cereso de Navojoa, entre otras actividades, y tiene programado tener un encuentro con seminaristas, así como visitar un hospital.