Karla busca “tesoros”

Un ejemplo de empatía con los familiares de los desaparecidos es el de la joven voluntaria del colectivo de Rastreadoras de Obregón

Por: Deniss Cabrera

A sus 18 años, Karla López Esparza ha decido ensuciarse las manos mientras escarba para encontrar víctimas de desaparición forzada.

Pero lo curioso es que, aunque entre los más de 600 desaparecidos en Sonora, ninguno forma parte de sus familiares o amigos, ella tomó la decisión de sumarse como voluntaria al colectivo Rastreadoras de Ciudad Obregón.

Durante al menos cinco meses, López Esparza ha recorrido el Municipio, cavando en predios baldíos e incluso en patios de viviendas para sacar cuerpos de los “ángeles” que muchas familias esperan de regreso en sus hogares.

La de ella es una de los cientos de historias de mujeres, que, contra viento y marea, se han armado de valor para ver regresar a sus hogares a quienes fueron víctimas de una desaparición forzada.

¿Qué fue lo que te motivó a unirte al colectivo?

- Querer ayudar a las personas que tienen algún desaparecido, tenía mucho con la inquietud, mi mamá me decía que no me iban a dejar por no tener un desaparecido. Un día miré que solicitaban voluntarios, eso fue un viernes, y para el sábado ya estaba en búsqueda; fuimos a una parte donde ya habían encontrado siete cuerpos, pero esa vez ya no se halló a nadie.

Y como aliada, por así decirlo, de estas tareas, ¿cómo te hace sentir cuando una búsqueda da positivo?

- Son experiencias que te marcan mucho, es mucho sentimiento de tristeza al ver a alguien, saber que tenía vida, son muchas emociones, de todo tipo.

Me tocó encontrar en la tercera búsqueda en la que colaoré, fue una osamenta en Pueblo Yaqui. Ya vi de todo, osamentas, cuerpos en estado de putrefacción; cuando los veo pienso en que eran personas que respiraban, comían, sentían. Al momento de sacarlo me pongo a rezar por ellos para que su alma tenga descanso y pienso en que su familia ya va a tener tranquilidad.

A Karla, el estar rodeada de tantas historias le han hecho cambiar la perspectiva que tiene de la vida, siendo su empatía e interés por apoyar a sus compañeras lo que ha permitido que pese a la escuela y las prácticas de slow pitch, cada sábado esté lista desde temprano para salir a campo.

¿Has considerado dejar a apoyar por la situación de inseguridad?

- Yo sigo firme en apoyarlas, les he dicho que no me importa nada con tal de ayudarles a regresarles a sus seres queridos que tienen desaparecidos.

En estos meses ¿Qué ha sido lo más difícil que te ha tocado presenciar en una búsqueda?

-La semana pasada, una señora creía que su hijo estaba en el patio, fuimos nosotras y empezamos a escarbar en una, tuvimos que tirar una parte del piso, al medio metro salió uno de sus tenis; parece que era el hijo de la señora, yo estaba desesperada porque la mamá no se quería ir del lugar, fue muy desesperante pensar en qué iba a pasar, sentía tristeza por ella.

Aunque en un principio la decisión de Karla causó preocupación a sus padres, hoy se sienten orgullosos de cómo la joven ha preferido ayudar a las mamás que buscan a sus hijos, en lugar de andar de fiesta o con sus amigos.

“Me siento muy orgullosa, ella elige su tiempo entre los juegos, entrenamientos y la búsqueda, a veces llega con hambre o lastimada; ella no ha faltado a ninguna búsqueda desde que entró”, expresó su mamá, Claudia Lizbeth Esparza Coronado.

En el colectivo hacen falta manos que ayuden, son muchos los desaparecidos, se ocupa gasolina, agua, e incluso comida, apoyo no solo económico, sino también moral para seguir escarbando para encontrar a los “tesoros” de cientos de familias.

LAS ESTADÍSTICAS DE LOS DESAPARECIDOS

Según las estadísticas de la Comisión de Búsqueda Estatal en Sonora, suman más de 640 personas desaparecidas en el periodo de febrero de 2020 a la fecha, de los cuales se han logrado localizar a 40 personas, solo 11 de ellas con vida.

Mientras que el colectivo Rastreadoras de Ciudad Obregón, mantiene también un registro de 600 desaparecidos, conteo que inició en 2018 y del cual el 40 por ciento son mujeres, cifras que en los últimos meses han tenido un incremento.

Sin embargo, durante las labores de búsqueda que se han llevado a cabo en los últimos casi tres años, han logrado encontrar a cerca de 100 cuerpos en fosas clandestinas.