Un pacto con su padre la mantiene en la actividad, junto con sus estudios y los quehaceres de su casa
Por: Raúl Esparza
Alternar su vida tejiendo atarrayas con sus estudios de licenciatura en Biología en el ITVY, es para Gloria Viviana Olivas Moroyoqui, de 22 años de edad, una forma de ganar su propio dinero, y el hecho de ser mujer no la limita ni para estudiar.
El oficio jovencitale fue aprendido de su papá, don Pedro Olivas Olivas, hace doce años siendo ella apenas una adolescente, por lo que no considera que tejer atarrayas sea un trabajo exclusivo para los hombres.
Para ella, se trata de saber cuál es tu propia convicción y responde que es algo entre saber elegir independientemente de cual sea el género que tengas y en su caso es un trato pactado con su papá, ante quien se comprometió a alternar entre los quehaceres de la casa y sus estudios.
Dice que hay personas que le dicen que es muy joven, que cómo es posible que esté haciendo esto de tejer atarrayas.
Además, le preguntan que si por el hecho de ser mujer es sencillo o complicado y sus respuestas, menciona, son que esto no limita la enseñanza de su papá,es decir que siempre va a poder, que realmente se debe aprender sin importar nada y que si de plano no puede es porque se llegó al límite.
"Yo con esto me mantengo, lo que gano es para mí y mis cosas, saco para la escuela, de aquí salió para mis hermanos, a las personas les impresiona mucho cuando la gente viene a comprar un material, me ven, les impresiona mucho lo que hacemos, les parece curioso como se forma una atarraya como es el movimiento, se les hace complicado pero en verdad es algo muy sencillo"comenta.
Menciona que la formación que su padre le dio junto con sus hermanos es la de no distinguir entre hombres y mujeres.
Ella observa que lo común es que los hombres sepan tejer atarrayas, pero que el hombre es desesperado y en cambio las mujeres se concentran mejor y realmente disfrutan tejer.
Por eso, su mensaje para las mujeres es:"no limitarse, porque los trabajos no son de géneros". Para ella, si a una mujer le gusta una actividad hay que hacerla con toda su capacidad.