Indiferencia y falta de respeto hacia personas discapacitadas

Faltan rampas, las que hay las obstruyen y están descuidadas, complican la vida a quienes ya la tiene complicada

Por: Fabiola Navarro

Jesusa Arias Rochín quedó postrada en silla de ruedas desde hace 10 años, tras haber sido atropellada por un camión; a ella le apoya su esposo, Gastón Sotelo Rodríguez, quien debido a la falta de rampas adecuadas en las banquetas y la irresponsabilidad ciudadana al obstruirlas, deben pasar por varias dificultades al transitar por las calles.

Y es que en Cajeme se carece de una cultura de inclusión urbana para las personas con capacidades diferentes, ya que ni las autoridades municipales, ni la misma ciudadanía contribuyen a despejar o mejorar las rampas para este sector de la población.

Durante un recorrido realizado por las calles de Ciudad Obregón, como parte de un ejercicio periodístico, se pudo confirmar que las rampas para personas con discapacidad son obstruidas por automovilistas, incluso, las que se encuentran frente a la Catedral de Ciudad Obregón, con barrotes para cerrar la calle 5 de Febrero.

Otras rampas del centro comercial se encuentran totalmente destrozadas desde hace varias administraciones municipales, sin que hayan sido reparadas y representan, además, un peligro para los transeúntes.

El alcalde Javier Lamarque Cano ha declarado que buscarán las formas de reparar y acondicionar las rampas para personas con discapacidad en el centro de la ciudad.