Participaron maestras, médicos, personal de trabajo social y asociaciones externas en la organización de este especial convivio
Por: César Omar Leyva
El hecho de estar hospitalizados no fue impedimento para que niños y niñas que enfrentan el cáncer y otras enfermedades tuvieran la oportunidad de participar en una posada organizada dentro del Hospital General Regional No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ciudad Obregón.
Una divertida pastorela personificada por médicos residentes abrió la convivencia que dio la oportunidad a los niños de salir de sus cuartos para, con todos los cuidados necesarios, ser trasladados al auditorio del hospital donde se desarrolló el evento.
La organización estuvo a cargo de las maestras que forman parte del programa "Sigamos aprendiendo en el hospital" con el que se dan clases a niños y niñas mientras se encuentra en tratamiento contra el cáncer.
RECORDATORIO ESPECIAL DE PARTE DE SU DOCTORA
Al inicio de la posada la doctora Lizeth Bojórquez Steffani dirigió un mensaje donde recordó que el verdadero significado de la Navidad es el nacimiento de Jesús quien hace real la presencia de Dios entre todas las personas.
"La presencia de Dios está en todo aquel que sufre y en todo aquel que ora. Y aquí en el hospital se sufre y se ora mucho, por eso vamos a hacer un festival en honor a esa presencia de Dios que nunca nos deja solos", enfatizó la oncóloga pediatra.
La doctora, agregó que en el hospital siempre habrá personal de salud dispuestos a brindar un gesto de cercanía y acompañamiento a todos los menores que enfrentan el cáncer, así como a sus familias pues también son parte del proceso.
UNA MAÑANA LLENA DE SORPRESAS
Seguido de la pastorela representada por los médicos, hubo un bailable a cargo de estudiantes de la Escuela Normal de Especialización (ENEE) y posteriormente los integrantes del Coro Shalom ambientaron con villancicos.
La sorpresa más grande para los niños vino cuando llegaron Stitch y Minnie, quienes bailaron y convivieron con ellos, les regalaron cobijas y posteriormente subieron a visitar en sus cuartos a los niños que no pudieron bajar a la posada.
El evento incluyó también la presentación de una obra de teatro y un show de un gigante robot lleno de luces que fue del agrado de los niños y sus familias.
Todos los niños asistentes recibieron dulces, pastel y regalos donados por bienhechores y personal del IMSS que colaboró en la organización.