En Cajeme el Parque Oviáchic está en el olvido

Habitantes de la comunidad de Buenavista piden apoyo a las autoridades para rescatar este espacio familiar

Por: Javier Zepeda

Solo, sucio y con deterioro en sus juegos, es como se encuentra actualmente el Parque
Oviáchic, ubicado en la comunidad de
Buenavista, razón por la que los habitantes solicitan apoyo a las autoridades municipales para que se rescate este espacio en beneficio de las familias cajemenses.

Ayer por la tarde algunos automovilistas llegaron a la zona, solamente para encontrar las instalaciones totalmente cerradas. El delegado de Buena Vista, Juan de Dios Sierra Olivarría, explicó que el parque lleva 2 semanas sin abrir sus puertas por la seguridad de los visitantes, debido a que las ramas de algunos árboles se cayeron con los fuertes vientos y aún no son retiradas de la zona.

“Ya estamos trabajando en ello y esperamos que pronto vuelva a abrir, había estado ingresando gente con normalidad, pero con estos vientos y lluvias hubo algunas afectaciones, por lo que cerró temporalmente”, dijo.

Habitantes del pueblo externaron que generalmente el parque se encuentra abandonado, pues los juegos se encuentran en el deterioro, así como otras partes de su infraestructura.

Doña Ana, una de las habitantes de esta comunidad, dijo que algunos vecinos tienen un proyecto para rescatarlo y se encuentran haciendo las gestiones correspondientes. Asimismo, adquirieron algunas herramientas por su propia cuenta para apoyar con la limpieza del lugar, pero lo que compraron fue robado hace unas semanas.

“Compramos algunas “arañas”, pero se las robaron. Lo mismo pasa con algunas parrillas del parque, sospechamos que las personas responsables de los robos las venden al fierro viejo”, dijo.

Asimismo, hizo un llamado a las autoridades municipales para que apoyen con el rescate de este espacio, pues aseguró que en años pasados fue uno de los más recurridos por los visitantes y habitantes en el Municipio.

“Destacaba por ser un espacio familiar, donde las personas se reunían cada fin de semana para pasar un buen rato. Ahora solamente lo visitan cerca de 10 o 12 familias al día, lo que tampoco resulta costeable para el mantenimiento, ni para la limpieza, pues solo abre los fines de semana”, comentó.

Habitantes de la comunidad realizaron distintas actividades el año pasado para comprar pintura y aplicarla a algunos juegos, con la esperanza de dar una mejor imagen a las instalaciones