Sacerdote señala que continuar su uso es responsabilidad social, pues se cuida a las demás personas
Por: Francisco Minjares
El uso de cubrebocas es un acto de caridad en el que se protege a las familias y personas cercanas, afirmó el párroco de la Iglesia de Nuestra Señora Guadalupe, Javier Aníbal Lauterio Valdez.
Luego que se oficializara en el Boletín Oficial la eliminación de la obligatoriedad del uso de cubrebocas en el Estado, el sacerdote dijo que el seguirlo usando es un acto de responsabilidad social en el que se cuida a las demás personas.
"Se les pide por caridad, por responsabilidad social y por sentido común, si empiezan a subir los casos, que intenten usar el cubrebocas en recintos cerrados", señaló.
Añadió que desde el anuncio de la derogación de la Ley se habló con los sacerdotes de la Diócesis de Ciudad Obregón para informarles que se seguiría invitando a las personas que lo usen, aunque ya no sería obligatorio para quienes buscaran abstenerlo de portarlo.
"Se les dijo a los sacerdotes, cuando llegue a derogarse la Ley, aun así, por cuidado de todos y cuidado personal hay que seguirlo usando, recordemos que derogar la Ley no significa prohibir el cubrebocas, sino ser responsable cada uno de los demás, entonces se les va a invitar a que sigan usándolo en recintos cerrados, aunque el que no quiera usar, no se le va a obligar".
Las parroquias estuvieron trabajando con las medidas cautelares durante la pandemia del Covid-19 e incluso algunas siguen con las transmisiones digitales para quienes no asistan por cuestiones de salud.
Los católicos apostarán a la responsabilidad social para cuidarse unos a otros