Diversos estudios señalan que la sincronización de semáforos en vialidades puede ayudar a ahorrar una significativa cantidad de tiempo y dinero.
Por: César Omar Leyva
Cuando las ciudades comienzan a crecer y aumenta el flujo vehicular por las principales avenidas la sincronización de semáforos se vuelve fundamental para agilizar la movilidad, ya que además de disminuir los tiempos de traslado se traduce en un ahorro para el bolsillo de los automovilistas.
En Ciudad Obregón, como en otras ciudades, el problema de falta de sincronización se padece desde hace años, aun cuando ha habido intentos de los diferentes gobiernos por hacer algo al respecto.
La Secretaría de Imagen Urbana y Servicios Públicos ha presentado un proyecto de modernización de semáforos que incluye la sincronización para que los automovilistas no se tengan que detener cada una o dos cuadras porque les toca la luz roja.
Gerardo Sastre Iriarte, titular de la dependencia municipal, informó que de los 136 cruceros semaforizados que hay en la ciudad, 105 cuentan con un sistema que puede ser programado para lograr la sincronización, lo cual sería ideal en avenidas como la Miguel Alemán, Guerrero o Rodolfo Elías Calles.
¿CUÁNTO TIEMPO AHORRA LA SINCRONIZACIÓN?
En ciudades como Puebla, la sincronización semafórica logró reducir 9 por ciento los tiempos de traslado, y aumentar en un 11 por ciento las velocidades vehiculares dentro de los límites establecidos, según el portal Cursor Informativo.
Por otro lado un estudio del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas de la UNAM desarrollaron algoritmos para agilizar tránsito de usuarios, sincronizar semáforos y mejorar el flujo de automóviles mediante la simulación del sistema de comunicación y organización de parvadas de pájaros.
Los semáforos autoorganizantes, explicó el investigador Carlos Gershenson García, reducirían hasta en 50 por ciento el tiempo de traslado y un 25 por ciento las emisiones contaminantes, además de producir un ahorro de gasolina.
TIEMPO DE AHORRO EN LA CALLE MIGUEL ALEMÁN
En una avenida como la Miguel Alemán que tiene una longitud de 3.4 kilómetros y nueve cruceros con semáforo, el tiempo de recorridos bajaría de 13.2 a 4.2 minutos, esto tomando en cuenta una velocidad promedio de 50 kilómetros por hora.
Es decir el ahorro sería de hasta 9 minutos lo que no solo representa ahorro de tiempo sino también de combustible.