Por: Denisse Robles
El asesinato del candidato a la alcaldía de Cajeme, Abel Murrieta Gutiérrez, fue el pago por desafiar al narcotráfico para poner en orden a Cajeme, el municipio que aspiraba gobernar, dijo Clemente Castañeda Hoeflich.
El coordinador nacional de Movimiento Ciudadano (MC) señaló, durante una rueda de prensa, que “Abel pagó por haber dicho una y otra vez en su campaña que tenía el valor de enfrentar al narco y que iba a poner orden en cuanto llegara a la Alcaldía, por lo que el asesinato de Abel no puede sino considerarse como un atentado a la democracia en Sonora”, mencionó.
Señaló que este asesinato es un atentado a la democracia en el estado, por lo que responsabiliza a los tres niveles de gobierno.
Según el dirigente de MC, el crimen Gobierna y las autoridades se encuentra rebasadas y con balas quieren condenar a la desesperanza.