Por: Eduardo Sánchez
Los pescadores que se quedan en los campos pesqueros salen a la captura del calamar, pero no hay producción, “se van todo el día y regresan con dos o tres taras, muy poco”.
Agrego, “no cubren ni los gastos, porque la gasolina y otros insumos están por las nubes, son muy pocos pescadores los que se quedan, prefieren irse a trabajar al campo y la ciudad, para sostener a sus familias”.
El panorama es desolador, reiteró, a muchos no les alcanza, ni para comer, y no llegan los apoyos, los recursos del Programa Bienpesca empiezan a llegar hasta agosto, y no es para todos, “se registran, pero no les llega a todos”.