La tormenta de categoría 4 se mantuvo casi estática mientras despedazaba techos, volcaba vehículos y obligaba incluso a las cuadrillas de rescate a refugiarse mientras pasaba el meteoro.
Las autoridades señalaron que recibieron un "tremendo número de llamadas de personas dentro de casas inundadas.
Una estación de radio recibió más de dos mil mensajes solicitando ayuda, incluyendo reportes de un bebé de cinco meses de edad sobre un techo y una abuela y seis nietos que abrieron un hoyo en su techo para escapar del creciente nivel del agua.
Otros reportes incluían a un grupo de ocho niños y cinco adultos varados en una autopista, así como dos albergues inundados.
Los meteorólogos pronostican que Dorian se mantenga en paralelo al litoral, pero uno de ellos, Daniel Brown, advirtió que "tan sólo una pequeña desviación" podría ser suficiente para que el huracán se dirija a tierra.
A las 5 de la tarde, hora del este de Estados Unidos, la velocidad de los vientos máximos sostenidos de la tormenta se redujo ligeramente a 230 kilómetros por hora.
El vórtice pasaba lentamente sobre Gran Bahama a 2 km/h.








