PRI Cajeme y 2021
Enero 22, 2021 - 10:47 p.m.
Cuando los priistas hablan de las perspectivas electorales de su partido en Cajeme, bajan la voz y dicen: “Va a estar ca… nijo, pero no imposible”.
Y señalan que el panorama no es de optimismo al 100 pero no porque tengan enfrente los resultados apabullantes de un Gobierno morenista que les haga percibir una derrota de antemano sino todo lo contrario.
La labor de Sergio Pablo Mariscal Alvarado hace ver a la sociedad que hay mejores formas de gobernar y que quienes tienen la experiencia son los del PRI o del PAN, con todo y sus secuelas tras haber ejercido el poder años atrás.
Muchos priistas se fueron a otros partidos, señalan, pero lo que se llama el “voto duro” priista no ha disminuido potencialmente porque, según ellos, el hecho de haber trabajado ya desde el Gobierno en años anteriores permite contar con una base simpatizante bastante robusta aún.
Noticia Relacionada
Pero ahora que han decidido aliarse con el PAN y PRD para la aventura electoral 2021, enfatizan, las cosas pintan mejor porque, en principio, los cajemenses siempre han avalado al panismo como la mejor oposición, pero a los partidos de izquierda solamente una vez se les dio oportunidad y la perdieron con un errático manejo de Javier Lamarque Cano y las tribus perredistas cuando estuvieron en la silla municipal.
Con el triunfo de Mariscal Alvarado en 2018 no puede hablarse de que la población se volcó hacia la izquierda, sostienen, sino que mas bien fue hacia la figura de Andrés Manuel López Obrador, que en este proceso electoral no estará en las boletas.
El margen de triunfo se eleva al saberse que en Cajeme la alianza de Morena no tiene pensado un candidato común a la alcaldía con PT, que irá solo con la figura de Orlando “Siri” Salido, muy conocido por sus quehaceres deportivos, pero lo cual no le alcanza para perfilarlo como experto en la política o el ejercicio de gobernar.
En el PRI a la vez las figuras que mas se han movido para alcanzar la nominación a la alcaldía son Armando Alcalá Alcaraz y Omar Guillén Partida, pero será difícil que cualquiera de ellos llegue a esa posición.
La que se ganó la nominación, en cambio, fue Anabel Acosta Islas, quien ha hecho talacha en la medida de sus posibilidades y a pesar de que lo que las feministas llaman “patriarcado” ha jugado en su contra, su disciplina y relaciones le han ayudado para que las encuestas la posicionen como la carta contra la cual habrán de apostar los otros partidos.
Hay evidencias de que la vía independiente también ha sumado simpatías en Cajeme y podría ser la alternativa para llegar a la silla más cómoda de Palacio Municipal, por lo que la alianza PRI-PAN-PRD no irá a un día de campo el 6 de junio.
Movimiento Ciudadano podría despuntar pero solamente con “trucos”, es decir jugadas de ajedrez que ubiquen a su precandidato a gobernador al lado de Ernesto Gándara Camou, a cambio de la alcaldía cajemense.
En estos juegos políticos todo puede suceder, pues los aspirantes no cuentan con el 100% de simpatías, ni siquiera entre los suyos, y eso permite mover hacia uno u otro lado el resultado final.
Es por ello que los ciudadanos tendrán que fijarse muy bien a quién le darán el voto. No hay que dejarse guiar por las vísceras sino por el cerebro.
Cajeme no aguanta otros tres años de inacción.
Comentarios: francisco@diariodelyaqui.mx
