Damita libra secuestro
Septiembre 28, 2020 - 10:14 p.m.
Jesús Alejandro Quintero
Narra el calvario que vivió con un supuesto chofer de Uber. "Estaba aterrorizada, es horrible pasar por eso", refiere Nesly
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Jesús Alejandro Quintero
Una joven de 22 años fue víctima de un intento de “secuestro” por parte de un conductor de Uber, del cual pudo escapar milagrosamente al saltar del vehículo en circulación por la puerta trasera frente al Hospital General.
Nesly relató que los hechos ocurrieron el pasado jueves 24 de septiembre, alrededor de las 6:00 de la tarde, cuando esperaba transporte fuera de una tienda en el bulevar No Reelección junto a otra joven.
“Eran como las 6:00 de la tarde, estábamos otra muchacha y yo y se paró un carro para ofrecernos el servicio de llevarnos, nos preguntó a dónde íbamos y ella le contestó que al IMSS y yo a la colonia Sonora, entonces aceptó y nos subimos”, explicó.
Agregó que todo iba bien, como cualquier otro viaje en Uber, los cuales circulan por la ciudad y fungen como camiones de ruta urbana al cobrar diez pesos el viaje.
“Todo iba normal hasta que la muchacha se bajó y le pagó al conductor, entonces él me dijo ‘ya te tocaba’ y yo me reí, porque no sabía a lo que se refería, entonces puso seguro al carro y me gritó ‘valiste v… ya te tocaba y me voy a cobrar contigo’”. Fue entonces que entré en pánico”, recordó.
Agregó que el chofer continuó su recorrido por la calle Pesqueira al sur de la ciudad, mientras que ella se mostraba desesperada y le pedía que la dejara bajar, mientras buscaba la manera de poder abrir las puertas.
“Yo me asusté y empecé a gritar y le decía que abriera la puerta, él aceleraba y yo con el celular le pegaba al vidrio para saltar por ahí, trataba de abrir y él me decía que ya me tocaba. Por donde está el Hospital General le pude quitar el seguro o él lo hizo, pude abrir la puerta y me aventé cuando bajó la velocidad y él frenó creí que se iba a regresar por mí”, externó.
Añadió que el vehículo se fue con la puerta abierta a toda velocidad, mientras que ella buscaba un lugar para refugiarse y llamaba a sus contactos para que se enteraran de la situación.
“Me metí entre las casas, entre las ramas para esconderme, me puse a llorar, les llamé a todo mundo. Les llamé a mis padres y mi papá llamó al 911 para informar sobre lo ocurrido. Fue una experiencia horrible”, contó.
Aclaró que en múltiples ocasiones había utilizado los Uber de diez pesos como medio de transporte por los pocos camiones en circulación que hay, pero que nunca había pasado algo como esto, por lo que se subió confiada en que no iba a pasar nada.
“No quiero que nadie pase por esto, creo que Navojoa es tranquilo como para que empiecen a pasar este tipo de cosas. Que se cuiden mucho, es horrible pasar por eso, pasan muchas cosas por la cabeza, lo único que piensas es que vas a ser una más del montón. Estaba aterrorizada. La denuncia ya está puesta en el Ministerio Público”, confesó Nesly.
CARACTERÍSTICAS DEL VEHÍCULO Y CONDUCTOR
Aclaró que al momento de tomar el Uber no se fijó si traía placas o no, ya que lo miró de lado y nunca imaginó involucrarse en esa situación, por lo que después de saltar del vehículo quiso memorizar la matrícula, pero el transporte no contaba con los aluminios.
“No traía placas, no me había dado cuenta. Pero vi que en el vidrio de atrás traía una calcomanía verde de un perrito y una manzanita de Apple. El carro era un Nissan Versa, de color gris casi plateado”, detalló.
Por otro lado, el conductor traía un cubrebocas negro, ojos grandes, cabello negro y corto, de piel morena clara y complexión “llenito”.
